CONTENIDO EXCLUSIVO.
CONTENIDO EXCLUSIVO.Para los miles de migrantes que buscan llegar de manera irregular a Estados Unidos, México se ha convertido en la “parada técnica” que obligatoriamente deben hacer, pero no es solo un país de tránsito. La dinámica migratoria ha cambiado en el último año —ante la salida masiva de nicaragüenses, venezolanos, cubanos, entre otros— y ahora la tendencia es que cada vez son muchas más las personas que se aventuran a viajar sin guía o “coyote”, como se les conoce a quienes trafican migrantes.
Entre la población migrante nicaragüense se maneja la información que México está dando un permiso o salvoconducto para transitar, supuestamente, de manera “libre” por todo el país, y cruzar sin mayores problemas la frontera hacia Estados Unidos. Si bien, las autoridades migratorias de ese país brindan un tipo de documentación que autorice la movilización del migrante, se debe tener en cuenta en qué consiste este permiso.
Inicio de la ruta
La ruta del migrante en ese país comienza al cruzar la frontera entre Guatemala y México para llegar a Chiapas, donde se encuentra una estación migratoria que brinda un primer oficio para movilizarse en ese lugar.
“En Chiapas están dando oficios de salida, pero más que transitar lo que le está ordenando al migrante es dejar el país desde la frontera más cercana, o sea, la frontera con Guatemala”, comparte a LA PRENSA el periodista mexicano Otoniel Martínez, de TV Azteca Noticias.
Lea también: Nicaragüenses declinan a su refugio en Costa Rica para irse a Estados Unidos
Sin embargo, el objetivo de los migrantes es llegar a San Pedro Tapanatepec, en Oaxaca, al sureste de México, donde actualmente se concentra el grupo más grande de personas, en busca de ese supuesto permiso para transitar por todo el territorio mexicano.
“Cuando van a San Pedro, se les da una Forma Migratoria Múltiple (FMM) que es una estancia para un determinado tiempo, que con eso es lo que se están movilizando, (pero) el permiso lo están dando por razones humanitarias”, dice la organización Nicaragüenses en México.
Por su parte, el periodista mexicano, quien ha abordado de cerca este tema, indica que el migrante llega hasta Oaxaca creyendo que en esa estación migratoria se le dará un permiso para que “se mueva libremente en el país, lo cual no es cierto”.
Martínez resalta que en conversación con autoridades de Institución Nacional de Migración (INM) de México, le enfatizaron que no hay forma de que el migrante cruce legalmente, por medio de un permiso o salvoconducto, todo el país.
“No existe permiso que le permita moverse en todo el país ni de Estado en Estado. No hay manera de que el Instituto Nacional de Migración les dé un permiso para que lleguen al norte”, comparte el comunicador.
“Permisos” limitados
El desborde de migrantes en el país mexicano obligó al INM a mover y a habilitar un módulo en San Pedro, ya que inicialmente estaba en Tapachula, Chiapas, donde actualmente se estima la presencia de más 10 mil migrantes, de acuerdo con reportes del periodista mexicano.
Lea además: Récord de ingreso irregular de migrantes nicaragüenses a Estados Unidos en el año fiscal 2022
Es precisamente en San Pedro donde se da “el cuello de botella”, según Martínez. La alta cantidad de migrantes en busca de ese documento hace que sobrepase los límites de atención de Migración. Al día, las autoridades solo disponen de 50 permisos, y a la gente le toca esperar hasta 15 días para conseguirlo.
Martínez explica a LA PRENSA, de acuerdo con testimonios recogidos de migrantes, que una vez que las personas llegan a San Pedro se deben organizar en grupos de 50, hacer una lista de sus nombres y delegar a un “líder”, quien se encarga de hacer fila ante la oficina de Migración para esperar un turno.
El comunicador afirma que para este 26 de octubre, en esa estación circulaban unas 400 listas y que el turno iba por el número 189, mientras cada día más migrantes se reúnen en este lugar.
“Hay dos tipos de listas, una de solteros y otra de familias, pero esa es una organización entre los migrantes, no del Instituto Nacional de Migración (…) Me parece que el proceso es lento para mantener el mayor tiempo posible a los migrantes en ese lugar”, afirma Martínez.
Movilización restringida
En las redes sociales se pueden leer comentarios de gente que han cruzado México sin el acompañamiento de un coyote y “recomendando” su ruta, en la que aseguran que el permiso dado en San Pedro Tapanatepec sirve para recorrer todo ese país.
Sin embargo, Martínez aclaró que ese permiso, que autorizaba movilizarse por todo el país y tenía una vigencia de 30 días, ya no se está dando; sino que actualmente el documento indica que solo es para la movilidad dentro del mismo Estado y es válido solo por siete días.
#DueleRespirar | #Tapanatepec en #Oaxaca está colapsando.
— OTONIEL MARTÍNEZ (@_otomartinez) October 17, 2022
El número de migrantes ya superó al número de habitantes.
Habitantes: 8 mil
Migrantes varados: 12 mil pic.twitter.com/NYuucMSfPe
Martínez considera que el migrante “va engañado” a Oaxaca buscando dicho permiso que le hará llegar “legalmente” a la frontera con Estados Unidos.
“Piensan que con ese (permiso) se van a mover hasta el norte, lo cual tampoco es cierto”, insiste Martínez.
Los migrantes, siguiendo su ruta hacia el norte, avanzan por sus propios medios: caminando, al raid, en camiones, o pagando coyotes; conscientes de que si son detenidos por Migración pueden ser, o llevados a la estación o regresados a la frontera con Guatemala.
Lea también: ¿Se puede extender a los nicaragüenses el cierre de la frontera de Estados Unidos?
“Entonces cuando salen de territorio oaxaqueño y se pasan a otro Estado, corren el riesgo de ser detenidos y regresados otra vez a la frontera sur”, declara Martínez.
Condiciones deplorables
Martínez, quien dio cobertura a esta situación desde el terreno, señala que Oaxaca está colapsado. El número de migrantes ya superó al número de habitantes, que es de ocho mil ciudadanos y en ese lugar ya se siente el desabasto de los servicios.
En las calles del pequeño pueblo de San Pedro se puede ver a cientos de migrantes caminando, acostados en el suelo, levantando pequeñas chozas de plástico, haciendo filas para ir al banco… Todo eso mientras esperan su turno.
“Es un campamento donde solamente les pusieron carpas, tarimas de madera en el piso y ellos ponen cartones o trapos para tratar de dormir, baños completamente sucios, no les dan alimento. O sea, el migrante tiene que ver cómo come, cómo vive, cómo hace todo”, expone Martínez.
El comunicador dice que la entrada al pueblo se ha convertido en “un corredor comercial”, puesto que también se mira al migrante “vendiendo lo que puede”, como cigarros, refrescos, galletas, arepas, incluso, celulares.
“Hay problemas en el pueblo de luz, de agua, de recolección de basura, servicios completamente saturados, alguna escasez ya de productos en los supermercados y Migración no tiene ni un orden, ni horarios ni formas para dar esos permisos”, manifiesta Martínez, quien refiere que en la estación migratoria de San Pedro las autoridades a cómo pueden atender en la mañana, pueden hacerlo hasta el mediodía, o también cerrar temprano.
Monitoreo de la ruta
Nicaragüenses en México señaló que si bien la migración irregular realizada con respaldo de un permiso migratorio no deja de tener riesgos, la “ventaja” de esto es que la persona va dejando el registro por su paso por suelo mexicano, lo que significa que de alguna manera “hay un monitoreo, y si ya es detenido, al menos hay un lugar dónde buscarlo. Con los coyotes no tenés idea de dónde estás”.
La organización resaltó que los riesgos de que sean extorsionados o puedan tener algún accidente durante su trayectoria son latentes porque las personas se van transbordando por todo México, utilizando diferentes medios como camiones, taxis, buses, balsas u otros.
La persona que ingresa irregularmente a México debe conocer que las principales autoridades de estar enfrente de los operativos migratorios es el Instituto Nacional de Migración (INM) en conjunto con la Guardia Nacional.