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CONTENIDO EXCLUSIVO.La Ciencia en Nicaragua ha recibido otro fuerte golpe: el científico Jorge Huete Pérez, con 30 años de trayectoria y destacado biólogo molecular, fue desterrado por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, y se une al grupo de ciudadanos al que se les ha impedido entrar a su tierra natal.
“Sin duda alguna que su destierro forzado es una estupidez. No lo puede llamar de otra manera. O sea, solo un gobierno fascista, gorila que basa su poder en la fuerza, en las armas, en la violencia, en la represión, puede darse el lujo de dejar fuera del país a un científico como Huete”, comenta el también científico y catedrático Ernesto Medina.
Este 27 de septiembre se conoció a través de reportes periodísticos que el régimen orteguista impidió que el científico Huete Pérez regresara al país, tras un viaje de trabajo que realizaba en Argentina. En Panamá le informaron que no le habían permitido abordar el vuelo para Nicaragua.
El doctor Huete Pérez es vicerrector de la Universidad Centroamericana (UCA) y fundador de la Academia de Ciencias de Nicaragua (2009), cancelada arbitrariamente en mayo de este año por el régimen orteguista, dentro de una ola de ilegales cancelaciones a asociaciones y organizaciones no gubernamentales.
Otro ataque a “la inteligencia de Nicaragua”
Para Medina, Huete Pérez “es el científico más importante de Nicaragua hoy en día”, aún cuando en los últimos años se dedicó, desde su cargo de vicerrector de la UCA, “a promover y a crear condiciones para que otros jóvenes tuviesen una educación de calidad y se enamoraran y se dedicaran a la ciencia, descuidando su propia carrera”.
En 1999, el científico Huete Pérez fundó el Centro de Biología Molecular de la Universidad Centroamericana (UCA), el primer laboratorio de investigación y capacitación en Nicaragua. En el 2014, fue nombrado vicerrector de la Universidad Centroamericana (UCA).
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Medina considera que el destierro forzado de Huete no es más que otro ataque a la UCA, pero, sobre todo, “a la inteligencia en Nicaragua” y contra todo aquel que levantó su voz denunciando lo que ocurre en el país.
“Es un golpe muy importante. Pero yo lo considero más bien un paso más en esa obsesión que tienen Daniel Ortega y Rosario Murillo en contra de todas las personas y las instituciones que se atrevieron a levantar la voz y a decir ‘Señores, esto no puede continuar así, hay que buscar una salida a la crisis’; que fue lo que hizo la UCA”, plantea.
Durante el estallido de la crisis sociopolítica, en el 2018, Huete Pérez brindó su valoración al medio español ABC, donde abordó la situación del país, la lucha de los estudiantes y la posición de Ortega.
“Y Ortega cree que la UCA es responsable de todo eso y está obsesionado con pasarle la cuenta, pero sin darse cuenta de que con esa obsesión lo que está haciendo es afectando a una institución académica y cultural, que es fundamental para Nicaragua (…) Por muy obcecados y muy ignorantes que sean, tienen que entender que una universidad como la UCA es fundamental para el futuro de Nicaragua y que no pueden estar arriesgándolo únicamente por resentimiento político”, agrega.
Experiencia, estudios y reconocimientos
El catedrático se graduó en Ciencias de la Educación en 1990, luego obtuvo su Ph.D. (Doctorado en Filosofía) en Bioquímica/Biología Molecular, a través de un programa conjunto de la Universidad de Sao Paulo y la Universidad de California en San Francisco, y realizó un posdoctorado en Bioquímica.
En lo que va de su trayectoria, cuenta con unas 80 publicaciones científicas y ha sido citado más de 700 veces. Se ha dedicado a estudiar enfermedades infecciosas, y entre sus estudios se destaca el de la enfermedad de Chagas y, sobre todo, el del parásito Trypanosoma cruzi, desde el punto de vista molecular.
“Se convirtió seguramente en uno de los mayores expertos en el estudio de este parásito. Pero él también se ha dedicado al estudio de otras enfermedades infecciosas y también ha incursionado en el tema del uso de la genética y de la biología molecular para temas ambientales y ecológicos”, comparte su homólogo Medina, quien describe la carrera de Huete Pérez como brillante, versátil y exitosa.
De hecho, después del anuncio de la construcción del canal interoceánico en Nicaragua, en el 2013, el científico expresó su temor y señaló que antes de haberse dado la concesión a la empresa china, se tenía que haber hecho un estudio de impacto ambiental, de lo contrario, advirtió, podría derivarse en un desastre ambiental.
En 2016, Huete Pérez fue el primer nicaragüense que presidió la Comunidad Científica del Caribe (CCC).
Huete Pérez ha trabajado con destacados investigadores científicos como el brasileño Carlos Morel. Además, estuvo una temporada en la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, de la Universidad de Harvard, donde se dedicó al tema de las políticas científicas y, sobre todo, del impacto de la ciencia en países en desarrollo. Ha recibido numerosas becas y premios de diversas organizaciones, incluidas la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Fundación McArthur, entre otras.
“Como nicaragüense, como académico y como colega de Jorge Huete me siento ofendido, principalmente porque, mientras se le cierran las puertas de su país a un científico, a un maestro que está dirigiendo, yo diría que la única universidad de verdad de Nicaragua donde se hace investigación, que tiene la principal biblioteca del país y los centros de investigación más sólidos, se les abren las puertas a corruptos asesinos como (el expresidente Salvador) Sánchez Cerén, y a (Mauricio) Funes. Como nicaragüense yo me siento indignado y no puedo más que rechazar, repudiar, esta acción cobarde y estúpida”, manifiesta Medina.