En los cuatro primeros meses de 2022, la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica (DGME) ha recibido un total de 25,595 solicitudes de refugio de nicaragüenses, siendo marzo el mes que más casos recibieron las autoridades migratorias de ese país.
Una fuente de la DGME compartió con LA PRENSA las cifras actualizadas de solicitudes de refugio hechas por los nicaragüenses desde enero hasta abril de este año. Los datos revelan que en abril ese país recibió 5,338 solicitudes, una cifra inferior a las 8,194 solicitudes hechas en marzo y las 7,320 reportadas en febrero.
Aunque en abril las solicitudes de refugio disminuyeron, las cifras siguen siendo alarmantes cuando se comparan con las solicitudes hechas por ciudadanos de otros países, que sumadas todas no alcanzan ni los 200 casos.
Sociólogos han manifestado en diferentes ocasiones que esta masiva salida de nicaragüenses es provocada particularmente por la crisis económica y falta de oportunidades de empleo en el país, sin olvidar el estado de represión que la dictadura de Daniel Ortega mantiene contra grupos de oposición, organizaciones civiles y medios de comunicación.
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En noviembre de 2021, el dictador Ortega aseguró su quinto mandato y cuarto consecutivo en unas elecciones presidenciales que fueron desconocidas por la mayoría de países democráticos. En la actualidad, el mandatario nicaragüense mantiene en las cárceles a más de 180 presos políticos, mientras que otra parte de la población resiente la carestía de la vida.
Solicitudes aprobadas son mínimas
La fuente de migración costarricense compartió que del total de solicitudes de refugio recibidas en los primeros cuatro meses del año, solo 233 han sido aprobadas, 19 de ellas en abril.
Ese mismo comportamiento se ha mantenido en los últimos años, salvo en el 2020, cuando las autoridades aprobaron 2,408 solicitudes y denegaron 2,146. En el 2021 el panorama cambió, y del total de solicitudes recibidas en ese periodo, solo 215 fueron aprobadas y 253 fueron rechazadas.
La autoridad migratoria explicó a este Diario que en sí los plazos de respuesta se mantienen “altos”, sin embargo recordó que una vez es recibida la solicitud, ellos inician con la revisión y análisis para determinar si la persona aplica o no a este beneficio.
Añadió que para cada una de las solicitudes recibidas, la DGME aplica el procedimiento establecido en apego a la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados.
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«Por lo que, esto quiere decir que la resolución de aprobación o denegatoria a la solicitud no se da de forma inmediata (sino) posterior a su entrevista, se está trabajando para dar una respuesta expedita», comentó la fuente.
Y mientras más nicaragüenses siguen llegando a Costa Rica de forma irregular, también otro grupo de compatriotas han puesto su mirada en el norte como el principal destino para asilarse y mejorar su condición de vida. El flujo migratorio hacia Estados Unidos ha alcanzado cifras récord en los últimos meses.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), reportó que un total de 41,080 nicas se entregaron a las autoridades migratorias para solicitar asilo político.