Los periodistas Miguel Mora y Miguel Mendoza fueron declarados culpables. Abogados y defensores de derechos humanos consideraron estos juicios como “una farsa” y un ataque a la libertad de expresión y a los derechos humanos fundamentales.
El 4 de febrero se realizó el juicio de Mora, en que el Ministerio Público pidió 15 años de cárcel y la inhabilitación para ocupar cargos públicos.
La jueza Nadia Camila Tardencilla Rodríguez declaró culpable de «menoscabo a la integridad nacional» a Mora. Su dictamen se basó en tuits, videos de entrevistas y documentos personales de Mora presentados como pruebas por la Fiscalía.
Hasta ahora el juicio de Mora es el más corto de los siete que se han realizado. Comenzó a las 9:00 de la mañana y concluyó a las 2:00 de la tarde. Tal como ha ocurrido en otros juicios, el abogado de Mora, Gerardo González Riega, no recibió copia del acta.
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Cuatro días después, el cronista deportivo Miguel Mendoza fue declarado culpable por el delito de «conspirar para cometer menoscabo contra la integridad nacional» y «difundir noticias falsas»; la Fiscalía pidió una pena de nueve años. Durante el proceso que duró unas ocho horas, el periodista aseguró que es un profesional del periodismo con más de treinta años de experiencia, y se declaró orgulloso de pertenecer al periodismo independiente de Nicaragua.
Ambos periodistas se encuentran detenidos en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como el nuevo Chipote, donde además se realizaron los juicios, contrario a lo que establece la ley, de que deben ser donde opera el juez correspondiente.
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