La bancada oficialista de la Asamblea Nacional aprobó este jueves 14 de octubre la reforma a la Ley Creadora del Sistema Nacional para el aseguramiento de la calidad de la educación y reguladora del Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación (Ley 704), conocida como Ley creadora del CNEA, vigente desde hace 10 años.
La iniciativa fue introducida el pasado 21 de septiembre ante la Primera Secretaría de la Asamblea Nacional, por los diputados José Antonio Zepeda, presidente de la Comisión de Educación, Cultura, Deportes y Medios de Comunicación Social, y Maritza Espinales, miembro de esa misma comisión
Según lo establecido, la reforma tiene el propósito de agilizar los procesos de acreditación institucional y de carrera, para que las universidades de Nicaragua, que estén en capacidad y disposición, puedan obtener su acreditación institucional o de programas, en menor tiempo del establecido en la Ley vigente.
Además «mantener el carácter obligatorio de la acreditación institucional». Y de otorgar facultades al Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación (CNEA) para la acreditación obligatoria de carreras o programas de interés estratégico para el país, así como la supervisión obligatoria a las agencias acreditadoras que realicen procesos de acreditación en el país.
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Durante la discusión sobre dicha reforma, el diputado orteguista José Antonio Zepeda manifestó que la misma fortalecerá el marco jurídico de los procesos de aprendizaje y el cumplimiento de la calidad de la educación superior. La reforma a la Ley 704 fue aprobada con 84 votos a favor, cero en contra, cero abstención y seis presentes.
«Al realizar esta reforma a la Ley 704 estamos estableciendo la agilización de los procesos para acreditación que es tan urgente que requieren nuestras universidades para poder estar en ese mundo competitivo hoy del conocimiento y que nos brinda mayores oportunidades, porque lo primero que preguntan otras instituciones educativas de otro país es que si las universidades nicaragüenses están acreditadas y que obviamente eso responde a los avances y desarrollo científico y técnico que se desarrolla a nivel mundial», manifestó Zepeda.
“Tarea pendiente”
Por su parte, el diputado Mauricio Orúe Vásquez, vicepresidente de la Comisión de Educación, Cultura, Deporte y Medios de Comunicación e integrante de la bancada del Partido Liberal Independiente (PLI), manifestó que esta reforma a la Ley 704 era una “tarea pendiente” en Nicaragua y reconoció que el CNEA ha venido desarrollando “importantes esfuerzos” en materia de educación “para que logremos ir poco a poco escalando las posiciones necesarias para lograr el aseguramiento de la calidad de la educación, en este caso la educación superior en Nicaragua”.
Para el diputado Orúe, con esta reforma los futuros profesionales tendrán un “mayor respaldo” en los países extranjeros, debido a la acreditación que tendrán las universidades adscritas al CNU. El diputado hizo este comentario refiriéndose a las miles de personas que han tenido que salir del país y no han podido desempeñar su profesión y se han visto obligadas a realizar labores de obreros.
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«Con mayor respaldo podemos tomar nuestro título y viajar a cualquier país donde nos van a reconocer ese título, por eso estamos caminando hacia esa acreditación», sostuvo el diputado del PLI.
La reforma establece nueve requisitos para mantener el estatus de una institución de educación superior y acreditar los mínimos de calidad, entre estos: poseer un plan de desarrollo estratégico y los mecanismos necesarios de evaluación, planificación y seguimiento; ofrecer al menos cuatro carreras profesionales; disponer de los reglamentos necesarios para regular los procesos académicos, entre otros.
“Nos sentimos satisfechos porque todo el sistema nacional de educación de Nicaragua debe cambiar, nosotros proponemos desde nuestro partido una reforma profunda a la educación, pero esto es un paso, y por eso respaldamos de manera decidida esta reforma… y esto no obedece a un partido político, sino obedece a una política de Estado», agregó el diputado Orúe.