El régimen de Daniel Ortega no ha revelado detalles del acto principal para celebrar el 42 aniversario de la Revolución Popular Sandinista, el próximo 19 de julio, pero LA PRENSA ha constatado que desde hace dos días está en pleno arreglo la plaza de la Revolución, donde el año pasado se realizó un acto íntimo para la misma fecha, dejando atrás los eventos masivos.
Más de 40 personas realizaban la tarde de este viernes algún tipo de trabajo en el sitio. Unos con la ornamentación y otros con las estructuras metálicas para el sistema de luces y tarima principal. Además, había un inusual despliegue policial en el área y vigilantes privados atentos en los alrededores para evitar que personas ajenas a los arreglos se acercaran a fisgonear. Todo esto ocurría mientras en la Plaza Juan Pablo II, donde antes del año pasado era el epicentro de la celebración a lo grande, lucía desolada.
Además de recortar el jardín del mausoleo Carlos Fonseca Amador, ubicado frente a la antigua catedral de Managua, los operarios de la Alcaldía de Managua recibían decenas de maceteras, similares a las utilizadas el 19 de julio del año pasado para crear un pentagrama.
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A través del Ministerio del Trabajo (Mitrab), el régimen decretó feriado nacional con goce de salario para el próximo 19 de julio y para este fin de semana anunció 5,000 actividades en todo el territorio nacional, en el contexto de la celebración del 42 aniversario de la Revolución Sandinista y sin importar el incremento de contagios con el Covid-19.
Ostentosa celebración en años anteriores
Para cada 19 de julio, Rosario Murillo, primera dama y vicepresidenta del país, preparaba minuciosamente el arreglo del acto. Además de las flores adornando la tarima principal, mandaba a colocar estructuras y otros atractivos. Un año fue una fuente luminosa, que fue destruida días después; otro, los llamados árboles de la vida; y luego banderolas de luces.
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En el desarrollo de las obras participaban empresas privadas con la colocación del sonido y estructuras, e instituciones públicas como la Alcaldía de Managua y la Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica (Enatrel).
