El pastor evangélico Vicente Blanco Lezama, de 60 años, quedó en una posición incómoda al concluir la primera audiencia del juicio donde la Fiscalía le imputa el delito de encubrimiento.
Esto porque dos testigos que declararon ante el juez Carlos Silva Pedroza lo señalaron de haber facilitado la huida de los señalados por el crimen perpetrado contra el adolescente Roberto Gutiérrez Berríos, de 16 años.
Al concluir la primera audiencia del juicio, los periodistas que cubren la fuente judicial procuraron obtener la versión de Vicente Blanco, pero él mandó a decir con su abogado Oscar Ruiz que no hablaría del tema.
¿Qué hizo el pastor?
La noche del 22 de diciembre de 2018, en una calle del barrio Santa Ana, Roberto Gutiérrez Berríos fue ultimado por un disparo hecho presuntamente por Josué Israel Blanco Morales, de 25 años, hijo de Vicente Blanco, según la acusación fiscal.
En la ejecución del crimen también habría participado José Luis Collado Chacón, de 20 años, a quien igualmente el líder religioso le habría facilitado evadir la justicia al llevárselo de la escena del crimen en una camioneta, color dorado, doble cabina, placas M 101837, refiere el escrito acusatorio.
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El crimen fue en represalia porque el adolescente le reclamó a Josué Blanco Morales, cuando este con una motocicleta placa M163390 casi pasa arrollando a Ana Patricia Gutiérrez, quien estaba junto a la víctima frente a su casa, según las investigaciones hechas por la Policía.
Lo dicho por testigos
Juan Gutiérrez Laguna, padre de la víctima, al brindar su testimonio en el Juzgado Cuarto Distrito Penal de Juicio aseguró haber visto el momento en que el religioso Vicente Blanco subió en la camioneta antes descrita a los dos sospechosos de matar a su hijo y otros tres sujetos de identidad desconocida.
Preguntado por la representante del Ministerio Público cuánto tiempo transcurrió entre el momento en que su hijo fue baleado de manera mortal y el acusado apareció para llevarse a Josué Blanco en la camioneta, Gutiérrez respondió: “Fueron pocos minutos”, agregando que el presunto encubridor llegó antes que la Policía.
Juan Gutiérrez también reveló que con la ayuda de la Policía buscó en San Rafael del Sur a los sospechosos de matar a su hijo, pero cuando llegaron al lugar donde supuestamente estaban escondidos, no los encontraron.
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Ana Patricia Gutiérrez, quien fue la tercera y última testigo en pasar ante el juez Silva Pedroza, señaló que Vicente Blanco en su apuro por ayudar a los dos sospechosos de cometer el crimen casi se vuelca con la camioneta frente a su casa.
La testigo, al igual que el padre de la víctima, señalaron en la sala de audiencia al acusado, para después afirmar: “Cómo no lo voy a conocer, si él en un gran pastor en el barrio (Santa Ana)”.
Ana Patricia Gutiérrez denunció haber recibido amenazas de parte de un hijastro de Vicente Blanco y que por esa razón tuvo que irse a vivir a otro barrio de Managua por temor a represalias.
El juicio que este viernes fue suspendido a petición de la Fiscalía por falta de testigos, continuará el próximo 8 de julio, anunció el juez Carlos Silva Pedroza.