Arancha González Laya, ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España, afirmó que ha buscado diálogo con el régimen de Daniel Ortega con el fin de que se revierten las acciones represivas contra la oposición en Nicaragua como la detención de 20 nicaragüenses, incluyendo a cinco precandidatos y más de 10 opositores, sin embargo, no ha recibido respuesta. “De momento no veo progreso en esa dirección”, indicó.
“Nosotros en las últimas semanas, yo misma lo he hecho, de manera discreta, he buscado el diálogo con las autoridades nicaragüenses, he buscado un diálogo con ellos, el buscar que se revierta una serie de medidas que atentan contra los ciudadanos nicaragüenses, que atentan contra sus derechos, que atentan contra su capacidad de ser actores políticos en Nicaragua, que atentan contra principios de funcionamiento básico en Nicaragua”, añadió González.
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Ante dicho panorama, la ministra aseveró que su país está buscando en el seno de la Unión Europea (UE) adoptar medidas en las próximas semanas para que el Gobierno de Nicaragua revierta sus acciones.
“Evidentemente España, junto al resto de los otros Estados miembros de la UE, está considerando cuáles tienen que ser los próximos pasos. Nos preocupa la ciudadanía nicaragüense, nos preocupa que se estén pisoteando sus derechos y, por lo tanto, buscaremos en las próximas semanas adoptar medidas que nos ayuden a defender los derechos de los ciudadanos y ciudadanas nicaragüenses”, adelantó la funcionaria del país europeo.
Nicaragua debe cumplir con sus compromisos
Las declaraciones de González se dieron durante una rueda de prensa que brindó junto a su homóloga Erika Mouynes, ministra de Relaciones Exteriores de Panamá. En esa misma línea, González reiteró que para la comunidad internacional es sumamente importante que el gobierno de Ortega cumpla con sus compromisos con los estándares de democracia y respeto de derechos humanos de sus ciudadanos.
“Es muy importante que Nicaragua cumpla con los compromisos que ha adquirido con sus propios ciudadanos, Nicaragua se ha comprometido con los estándares de democracia y respeto de los derechos humanos, de libertades individuales, de procedimientos judiciales justos”, manifestó.
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Además, fue tajante en afirmar que “de lo que se trata aquí no es de que España le diga a Nicaragua lo que tiene que hacer, sino de que Nicaragua respete los compromisos que ha adquirido con sus propios ciudadanos”.
Panamá llama a la comunidad internacional a estar atentos
Mouynes, ministra de Relaciones Exteriores de Panamá, sobre la situación sociopolítica que atraviesa Nicaragua refirió que en conjunto con España propusieron un comunicado en el que “expresábamos nuestra profunda preocupación, por los eventos que se están dando que atenta contra la democracia, el pueblo nicaragüense merece unas elecciones libres, creíbles y transparentes”.
Por ello, la funcionaria panameña afirmó que “toda la comunidad internacional tiene que estar siguiendo de cerca, involucrándose, participando para ayudarlos a salir y a tener esas elecciones que tanto se merecen”, debido a que “depende de nosotros estar a la altura y buscar una solución real y efectiva”.
Ortega: “Dejen de estar con eso absurdo de que los pongamos libres”
El recrudecimiento de la represión en Nicaragua aumentó en las últimas semanas. Este miércoles Ortega declaró y le dejó claro a la comunidad internacional que no dará un pasó atrás con las detenciones de los opositores, ya que argumenta que ni siquiera son precandidatos presidenciales, sino que son “criminales” que han intentado organizar otro golpe de Estado.
“No estamos juzgando a políticos ni a candidatos. Estamos juzgando a criminales que han atentado contra el país al intentar nuevamente organizar otro 18 de abril, otro golpe de Estado. Que no vengan con el cuento que son candidatos, si aquí no hay candidatos inscritos (…) si ni siquiera tenían un candidato único”, vociferó el dictador.
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De esta manera, Ortega dejó claro que rechaza las demandas de la comunidad internacional para que libere a los opositores, y más bien reprochó que su gobierno no le solicita a Estados Unidos liberar a las más de 400 personas detenidas en noviembre pasado por el asalto al Congreso del país norteamericano.
“Dejen de estar con eso absurdo de que los pongamos libres. En EE. UU. son más de 400 ahí y aquí están pegando gritos por 20”, comparó el dictador.
Los señalamientos de Ortega han sido rechazados por los familiares de los presos políticos y ellos más bien le exigen al régimen el respeto a la integridad física de sus parientes por parte de los oficiales de la Policía orteguista, además de información sobre su paradero.