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La toma de posesión de Daniel Ortega en 2007 representó el regreso al poder del caudillo sandinista. LA PRENSA/ ARCHIVO

Cómo Daniel Ortega convirtió a Nicaragua en un sistema peor que un califato en 14 años consecutivos en el poder, según analistas

Analistas políticos explican cómo Ortega convirtió a Nicaragua de un Estado democrático y libre a un Estado que apunta a un sistema basado en el sultanato, peor que un califato. Estos son los derechos constitucionales secuestrados por la dictadura.

Daniel Ortega cumple este domingo 10 de enero 14 años en el poder de forma consecutiva, en los que ha venido tejiendo un sistema autoritario que, hasta la fecha, ha suprimido los derechos de los nicaragüenses y eliminando cualquier indicio de democracia en el país. Hoy los nicaragüenses tienen menos libertad que hace década y media.

Los analistas políticos y opositores al régimen, José Pallais Arana y Eliseo Núñez, así como el politólogo José Antonio Peraza coincidieron en que desde que llegó al poder en 2007, Ortega se ha encargado de eliminar “todos” los derechos que la Constitución Política de Nicaragua garantiza a los ciudadanos, organizaciones, medios de comunicación y partidos políticos, “con el fin de tener el control total del país”.

“El derecho a la libertad no existe, el derecho a la vida, que es elemental, se ha perdido por asesinatos en las protestas o los que han sido dirigidos; el derecho a la protesta ha sido suprimido, el acceso a la información, el derecho a asociarse ha sido eliminado; derecho a elegir no hay en Nicaragua, es decir, si revisamos la Constitución Política difícilmente vamos a encontrar un derecho que no haya sido suprimido, no ha dejado títere con cabeza”, manifestó Pallais.

Aunque hay otras acciones que la Administración de Ortega ha venido realizando a lo largo de estos 14 años en el poder, Pallais las resumió en cuatro mecanismos que han garantizado su estadía en el mismo.

“En primer lugar, Ortega tomó el control de todos los poderes del Estado, que no deja posibilidad de que los abusos del Ejecutivo puedan ser resueltos por otro poder del Estado. El segundo mecanismo ha sido la eliminación del Estado de Derecho, con el que el régimen se considera que está por encima de la ley y de la Constitución misma. El tercer mecanismo es a través del fortalecimiento de los órganos de fuerza consolidando el control sobre la Policía y el Ejército y haciendo uso de ellas para sostenerse a base de represión. Y el otro mecanismo ha sido coaptar la institucionalidad de los partidos políticos, que ya dejaron de ser opciones reales para discutirle el poder”, enumeró Pallais.

Los primeros ejes de ataque de Ortega

Según Núñez, desde el inicio de su primer mandato (2007-2011), los dos principales ejes de ataque de Ortega fueron a la libertad de asociación y a la libertad de expresión, que serían los ejes transversales para imponer un régimen totalitario.

“La libertad de asociación fue a través de ataques en dos ejes: ONG y partidos políticos cuando, al inicio de su mandato, ocupó al Consejo Supremo Electoral como una herramienta para escoger a sus adversarios, es decir, eso violenta la libertad de asociación porque no deja a los ciudadanos organizarse”, explicó Núñez.

Respecto  al derecho a la libertad de expresión, Núñez explicó que Ortega utilizó dos ejes bien marcados que consistieron en apoderarse de medios de comunicación y por medio de controlar el monopolio de la información pública.

“En el primer punto, Ortega adquirió medios de comunicación a través de compras forzadas, lo que se conocería como adquisiciones hostiles en cualquier parte del mundo; la gente cayó y recibió el dinero que él (Ortega) quiso darle por canales de televisión y demás medios. En el segundo eje, sobre el monopolio de la información pública, él lo hizo con el objetivo de mermar la capacidad de libertad periodística y libertad de expresión, porque a medida que vos no tenés información pública, en esa misma medida van a poder informar abiertamente”, argumentó Núñez.

Segunda fase: secuestrar derechos individuales

Según el exdiputado una vez que Ortega confiscó estos dos derechos constitucionales, el dictador siguió con la siguiente etapa que consistió en suprimir derechos individuales como parte de “un modelo bien pensado”.

De hecho en sus primeros días de mandato en 2007, Ortega dividió en dos a los medios de comunicación en el país e inicia a infringir el derecho al acceso a la información a la prensa independiente, así como a la ciudadanía, con la aprobación de una Ley de Acceso a la Información Pública que jamás ha respetado y unas reformas al Código Penal, que oscurecieron los conceptos de “información pública” e “información privada”.

La primera jugada fue congelar la publicidad estatal para posteriormente aplicar medidas tributarias que limitaron los beneficios económicos a los medios de comunicación que no se regían al partido de Gobierno.

Por otra parte, entre junio y agosto del mismo año, Ortega creó a los denominados Consejos del Poder Ciudadano que, según organizaciones de la sociedad civil y opositores, los consideraban como una red de espionaje social al servicio del Frente Sandinista. Estos fueron ratificados hasta el año siguiente.

“Lo primero que hizo fue acabar con la capacidad que tengas de asociarte para oponerte a él. Lo segundo es la libertad de expresión, pero en medio de todo esto Ortega acabó con el derecho a elegir, el derecho a una justicia imparcial, el derecho a ser escuchado, el derecho a proponer, el derecho a la vida y a la libertad en general, es decir, básicamente en la Constitución ya no queda un solo derecho que Ortega no haya confiscado, en mayor o en menor grado”, expuso Núñez.

“Ortega mira un mundo en que solo él tiene y la gente que le obedece tienen derechos, y eso que no todos, solo algunos; el resto de nicaragüenses solo tiene el deber de obedecerle”, agregó el exdiputado.

Sin libertades fundamentales

Según Peraza, desde el primer momento del mandato de Ortega, hubo un retroceso en las libertades fundamentales de los nicaragüenses, sin embargo considera que desde ese momento se debió poner un alto a las actitudes del dictador, algo que no se hizo y condujo a lo que hoy es Nicaragua.

“Desde el primer momento él puso sus Consejos del Poder Ciudadano, cambió las leyes como la 221 del poder ejecutivo, utilizó el poder electoral para sus fraudes, hasta llegar a las últimas cuatro leyes que ha aprobado en los últimos meses de 2020, pero desgraciadamente no se le puso alto desde el primer momento”, cuestionó Peraza.

A su criterio, Ortega poco a poco ha venido arrebatando derechos a los nicaragüenses “que difícilmente vamos a recuperar”. “En Nicaragua no existe ningún derecho constitucional porque están suspendidos. De hecho todos los derechos constitucionales ya estaban suspendidos desde 2007, pero a partir de 2018 prácticamente lo que hicieron es matar a la gente en las calles”, expuso.

Para Peraza, la libertades constitucionales más básicas que el régimen ha eliminado y que son las más graves son: la libertad de asociación, de reunión, de movilización y de expresión.

“Es decir, no podemos asociarnos, no podemos reunirnos, no podemos protestar, ni podemos movernos, esas cuatro libertades son fundamentales, que están registradas en la Constitución, y ahora nos han metido el transfuguismo, que significa que ahora cualquier diputado que diga algo que no le guste a Ortega lo van a destituir y eso es gravísimo, no se va a poder cambiar”, lamentó Peraza.

Ortega ha instaurado un sultanato

A criterio del exdiputado Eliseo Núñez, en los últimos 14 años, Ortega ha instaurado en Nicaragua un régimen que cumple un modelo de “sultanato”, porque no cuenta con limitaciones de otros poderes respecto a las acciones que realiza.

“Básicamente nosotros vivimos hoy un régimen preseudal, lo más parecido a un sultanato, que a un califato o a un reinado feudal, porque los reyes tenían algún tipo de limitaciones. Las cortes y los nobles en Europa eran en realidad grupos de gente poderosa que le limitaba el poder al rey; el Sultán no tenía limitaciones porque su poder devenía de un poder más grande que es el poder de Dios, entonces el régimen de Ortega se parece más a un sultanato, cuya definición es un señor de orden que decide por la vida y el haber de todos los que están bajo su régimen”, argumentó Núñez.

El exdiputado agregó que los derechos que deberían gozar los nicaragüenses y que Ortega ha violado en sus 14 años de mandato lo hará pasar a la historia “como el régimen moderno más absolutista que haya existido en América Latina.

“Ortega convirtió su régimen en un modelo absolutamente personal, es decir, pasó del totalitarismo, que es Cuba y Venezuela, al absolutismo. Para Ortega, la referencia del Estado es él, mientras que la referencia del Estado en Cuba y Venezuela es el partido. Aquí lo que hay es una dictadura de él”, explicó.

Agregó que su régimen es “absolutista en el último de los grados” y que solo puede ser comparado con el de Anastasio Somoza y Jean Claude Duvalier, en Haití “y eso que creo que los ha superado a ambos”.

Las tácticas de Ortega para dejar a
los nicaragüenses sin derechos constitucionales

2007.

2008. 

2009. 

  • Cancillería y Gobernación asfixian a ONG que denunciaron el fraude electoral de 2008.
  • Poder judicial emite una resolución que dejaba “inaplicable” el artículo 147 de la Constitución, que prohibía la reelección de un mandatario.
  • Anuncian el relevo de Omar Halleslevens a Julio César Avilés como jefe del Ejército.

2010. 

  • Empieza la adquisición de varias emisoras radiales y la compra del Canal 8 de televisión.
  • Ratifica al general Julio César Avilés como nuevo jefe del Ejército para los próximos cinco años.

2011. 

  • Ortega se postula para reelegirse en las elecciones presidenciales.
  • Comienza la campaña de entrega masiva de cédulas por parte del poder electoral.
  • Ortega se proclama ganador de los comicios con el 63 por ciento de los votos.

2012.

  • Ortega asume su segundo mandato con la presencia de solo siete mandatarios.
  • Anuncia la realización de un proyecto de construcción del Gran Canal Interoceánico.

2013. 

  • Muere Hugo Chávez y empieza a ceder el imperio económico de Venezuela y de Nicaragua.
  • Policías y turbas del régimen reprimen a manifestantes en el caso denominado OcupaINSS.

2014. 

  • Niegan el ingreso a Nicaragua de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para investigar violaciones a los derechos humanos.
  • Asume el control de la Policía a través de la derogación de la Ley de Seguridad Ciudadana.

2015. 

  • Prorroga por cinco años más a Julio César Avilés como jefe del Ejército.
  • Ejército confirma la adquisición de 50 tanques rusos.

2016. 

  • Ratifica a Aminta Granera como jefa de la Policía y aumenta número de cargos de altos rango.
  • CSE destituye a 16 diputados liberales y 12 suplentes por órdenes de Ortega.
  • Anuncian la postulación de Rosario Murillo como candidata a la Vicepresidencia.
  • Ortega se adjudica la victoria de las elecciones generales con una abstención del 70 por ciento.

2017. 

  • Ortega y Murillo toman posesión con pocos presidentes de respaldo.
  • Reforma al Código Penal y al Código Procesal Penal para darle más poder de sanción al régimen.
  • Reforman Ley Orgánica del Parlamento para darle poder total a Gustavo Porras.
  • Se realizan elecciones municipales con un abstencionismo del 75 por ciento.

2018.

  • Se registra incendio de grandes proporciones en la Reserva Biológica Indio Maíz.
  • Surgen las protestas contra las reformas al Seguro Social, posteriormente derogadas.
  • Policías y parapolicías reprimen a la ciudadanía que salió de forma masiva a las calles.
  • Suspenden la personalidad jurídica de organismos no gubernamentales.
  • Asalto y ataques contra los medios de comunicación.
  • OEA, Naciones Unidas, Estados Unidos, Unión Europea y otros foros internacionales, acusan al régimen de delitos de lesa humanidad.

2019.

  • Régimen aprueba Ley de «reconciliación y paz», Ley de Amnistía, Ley de Atención Integral a Víctimas, reforma a la Ley de Concertación Tributaria al sistema de Seguridad Social.
  • Por primera vez el Ejército se pronuncia sobre la existencia de parapolicías durante las protestas de 2018.
  • Inicia un Diálogo Nacional en el país.

2020. 

  • Aprueban cinco leyes represivas: Ley Putin, Ley Mordaza, pena de cadena perpetua; Ley de Rótulos y Ley de Inhibición.
  • Asamblea General de la OEA da plazo hasta marzo de 2020 a Ortega para que haga reformas al sistema electoral.

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