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CONTENIDO EXCLUSIVO.Después de una carrera en la que se coleccionan once Guantes de Oro, se acumulan 2,877 hits, se contabilizan 404 bases robadas y jugás más partidos que todos los shortstops en la historia de las Grandes Ligas (2,709), el Salón de la Fama de Cooperstown debería ser un destino natural.
Sin embargo, en los pasados cuatro años ha sido claro que la ruta no está del todo despejada para Omar Vizquel, el brillante torpedero venezolano que aparece por quinta vez entre los candidatos para ingresar al campo de los inmortales del beisbol, cuya ceremonia es en julio del 2021.
Vizquel parece situado en el medio de un fuego cruzado que enfrenta a los sabermétricos, quienes se apoyan en la tecnología y el análisis profundo para evaluar el desempeño de los jugadores y los que recurren a la simple observación y el instinto para juzgar el trabajo de los peloteros.
Nacido en Caracas, Venezuela, hace 53 años, Vizquel acumuló un promedio de .272 en su carrera de 24 temporadas, con .336 sobre las bases y .352 de slugging. Sumó 2,877 hits, de los que 80 fueron jonrones, con 1,445 carreras anotadas y 951 impulsadas, más las 404 bases robadas.
Y siempre hemos creído que su defensa espectacular debería ser suficiente para entrar al Salón de la Fama, al que eventualmente ingresará si se considera que en su primer año (2016) recibió 37 por ciento de los votos; en 2017, el 43 por ciento; en 2018, 46 por ciento y en 2019, 52.6 por ciento. Se necesitan un 75 por ciento para ser exaltado.
Esa es una progresión clara. De todos los peloteros que han recibido al menos un 37 por ciento de los vostos en su primer año de eligibilidad, todos, menos Steve Garvey, han ingreso a Cooperstown. Así que las oportunidades del paracorto venezolano son realmente factibles. Solo queda esperar.
No obstante, Vizquel tiene una fuerte oposición en muchos analistas quienes consideran que en términos concretos su defensa fue ligeramente mejor que el promedio, pero nada espectacular o mágica, y que su bate fue demasiado mediocre como para escogerlo. Que no se lo merece.
“Es un shortstop defensivo muy bueno. Ahora, que sea un mago con el guante utilizando como un argumento el hecho de que haya ganado once Guantes de Oro, creo que es debatible”, ha dicho Bill James, el padre de la sabermetría. Eso significa que su defensa pudo haber sido sobrevalorada.
A los ganadores de los Guantes de Oro los escogen los mánagers y los coaches de los equipos, los que no pueden votar por nadie de su club. Ellos se basan sobre todo en la observacion. Este año, los ganadores fueron escogidos por las máquinas con dispositivos para monitorear a los defensores.
Vizquel tiene el mejor porcentaje de fildeo entre todos los torpederos que han jugado un mínimo de 1,000 partidos en las Ligas Mayores con .984. Sin embargo, muchos consideran que esta métrica es muy básica y se presta diferentes interpretaciones, entre ellas, que el fildeador lo que busca es no cometer errores, pero no va tras batazos complicados ni ejecuta tiros riesgosos.
Hoy día se emplean mediciones como DSR (carreras salvadas a la defensiva) out sobre average, range factor (alcance/cobertura) y fWAR (WAR defensivo) en las cuales Vizquel no sale bien. Y ni siquiera se acerca a Ozzie Smith, un torpedero de Cooperstown con el que se le compara.
Por ejemplo, range factor, que tiene que ver con el alcance, sale de una fórmula que multiplica por nueve las asistencias y los outs y las divide entre innings jugados. A Vizquel le da un 4.62 en una época en la que el alcance promedio de la liga, era 4.61, es decir, sale como un defensor average.
Como hemos hablado muchas veces, el WAR es la estadística que agrupa toda la contribución de un jugador (con el bate, guante, brazo y corriendo) en las victorias de su equipo. Smith tuvo un WAR de 76.9 en su carrera, Vizquel, 45.6. Y si vemos el WAR defensivo: Smith, 44.2; Vizquel, 29.5.
“Incluso, si Vizquel llegara a igualar a Smith defensivamente, cosa que no sucede, en todo lo demás es mediocre, así que no merece entrar al Salón de la Fama”, afirma el escritor Michael Humphreys en su libro Wizardry, Los Más Grandes Fildeadores del Beisbol. Y ahí no le va bien a Vizquel.
El punto es que los análisis son más frecuentes y accesibles. La observación se puede comprobar con los datos. Y muchos consideran que Vizquel es un acumulador de cifras al jugar tantos años (24), aunque no llegó, por ejemplo a 3,000 hits, una cifra sí que lo hubiera ayudado mucho.
De todas formas, todo parece indicar que Vizquel sí entrará a Cooperstown, aunque quizá le tome algunos años todavía, pero es evidente como su ejército de críticos, entre los que se cuenta incluso su compatriota Juan Vené, irá creciendo en la medida que más sabermétricos puedan votar.
Edgard Rodríguez está en Twitter: @EdgardR