Después de meses de silencio sobre el comportamiento económico del país, el presidente del Banco Central de Nicaragua (BCN), Ovidio Reyes, reconoció el golpe de la pandemia a las finanzas públicas, pero lo intentó suavizar con un panorama menos adverso, en vías de recuperación, palabra que mencionó 13 veces durante su ponencia el jueves 15 de octubre, en la que destacó las medidas que el régimen orteguista, sin estrategia alguna, o por lo menos, no pública, implementara para proteger la economía.
En una exposición virtual realizada por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), en agosto pasado, se señaló al menos 12 medidas que los Bancos Centrales habían adoptado para amortiguar el impacto de la Covid-19 en la región y con ello, brindar un respiro a la población ahogada por fuertes medidas de confinamiento, el desplome del empleo y las preocupaciones de deudas por saldar. Nicaragua había adoptado apenas cuatro: ajuste a la baja de Tasa Líder de Política Monetaria, modificaciones a política de encajes o reservas; políticas macroprudenciales más laxas, y flexibilización de condiciones laborales.
En el segundo trimestre del año el Producto Interno Bruto (PIB) registró una reducción interanual de 7.9 por ciento con resultados sectoriales mixtos, es decir, que mientras las actividades referidas a hoteles y restaurantes se caían -53 por ciento, el sector pecuario representaba un leve incremento de 2.1 por ciento.
“Dentro de los países de la región centroamericana y República Dominicana, el PIB trimestral de Nicaragua muestra el mejor desempeño en términos de variación interanual, tanto en el primero como en el segundo trimestre de 2020. En particular, en el primer trimestre Nicaragua fue el país que más creció y en el segundo trimestre fue la economía con la menor incidencia en producción”, sopesó Reyes, quien atribuyó que el hecho de no haber adoptado medidas generales de confinamiento podrían explicar los resultados obtenidos.
Nicaragua es el único país en toda la región centroamericana que no se confinó mientras los demás países resguardaban a su población para evitar un azote más fuerte de la Covid-19. Aunque desde el inicio la apuesta era clara, nunca detener la economía, como lo afirmó el mismo presidente, Daniel Ortega y tampoco había estrategia o plan de por medio, algunas medidas aparecieron de forma paulatina después de mayo, las cuales Reyes no obvió en su ponencia.
Explicó que como “respuesta al efecto adverso de la pandemia, en el ámbito monetario se han adoptado una serie de medidas para incentivar la recuperación de la economía, para favorecer la liquidez, apoyar el flujo de crédito y la transmisión de la política monetaria”. Sin embargo, ¿Qué tanto de esto se ha logrado en realidad?
El economista y catedrático Luis Murillo explica que fueron medidas paliativas, que protegen a la banca, pero no al deudor, y él mismo lo comprobó. La Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif) emitió dos normativas. La primera estaba relacionada con una serie de medidas temporales para que los bancos pudiesen modificar los contratos de los deudores para extender plazos de pagos, cambiar las condiciones ya establecidas en los contratos crediticios o bien otorgarles un periodo de gracia de hasta seis meses. Pero a este respiro solo podrían acceder los clientes que hasta el 31 de marzo eran clasificados como clientes A y B.
Murillo entra en el rango de esa clasificación, y acudió amparado en estas medidas a una entidad bancaria para modificar su cuota de 285 dólares mensual con el objetivo de llegar a un techo de 200, que consideraba podría brindarle ese beneficio que en ese momento necesitaba, pero le dijeron que eso afectaría su récord crediticio, y le ofrecieron apegarse a los seis meses de alivio. Él aceptó la propuesta aunque sabía que lo dejaba bastante vulnerable en un futuro, ya que su cuota por esos seis meses quedó en 135 dólares, pero pasado el tiempo de gracia, se incrementa a 335 dólares. “Prácticamente quedo bastante vulnerable en el futuro”, expresó.
Es un hecho que las medidas ayudaron a mantener la estabilidad, aunque no completamente sólida de la banca y del sistema financiero porque utilizaron unas medidas bastantes puntuales y restrictivas, dijo Murillo. “La actividad financiera ha continuado su proceso de estabilización, reflejándose en aumento de los depósitos, aunque por un tema de riesgo la banca está siendo cautelosa en las entregas de crédito, manteniendo una elevada liquidez que favorecerá la inversión financiera, principalmente en depósitos e instrumentos del BCN. En este sentido, hasta agosto de 2020 los depósitos han continuado su crecimiento iniciado en diciembre de 2019, aumentando 13.2 por ciento interanual. La variación interanual del crédito fue la menos negativa desde noviembre de 2018 (-6.4 por ciento)”, señaló Reyes.
Y agregó que en el contexto de la Covid-19 y su incidencia en la capacidad de pago de los hogares y de las empresas, la Superintendencia de Bancos y de Otras Instituciones Financieras (Siboif), implementó una norma para facilitar condiciones especiales a los deudores afectados por la pandemia, pero que en casos como el del catedrático Murillo, no fueron del todo favorecedoras.
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La “increíble” tasa del empleo
Tanto Murillo como el economista Maykell Marenco coinciden con la expuesto en un artículo publicado en el blog del economista Néstor Avendaño, que se sorprenden de los datos publicados por el BCN sobre el empleo en Nicaragua, ya que los números oficiales muestran un panorama que contrasta con la salida de cientos de nicaragüenses de la formalidad desde el 2018, con la crisis sociopolítica, situación que se ha agudizado con la pandemia del Covid-19.
Esto dice el BCN: “la tasa de desempleo abierto pasó de 4.8 por ciento en el primer trimestre a 5.4 por ciento en el segundo trimestre, una tasa de incremento moderada con respecto a la reducción observada en la actividad económica”. Avendaño la calificó como un “dato increíble”, ya que eso significaría que ” tenemos una economía de pleno empleo”.
De hecho, las mismas cifras del BCN reflejan la caída de las afiliaciones del Instituto Nicaragüense de la Seguridad Social (INSS), que es otro de los medidores de empleabilidad en el país. En más de dos años de crisis sociopolítica más la pandemia, el INSS perdió 217,797 afiliados.
“¿Cuál es la tasa de desempleo equivalente, que se estima con el dato de la población económicamente activa subempleada? Según el BCN, la tasa de subempleo pasó de 44.7 por ciento a 45.9 por ciento (del total de ocupados) en los mismos trimestres arriba mencionados. Entonces, ¿por qué el BCN no publica la tasa de subutilización de la fuerza laboral, que es igual a la tasa de desempleo abierto más la tasa de desempleo equivalente?”, cuestionó Avendaño en el artículo publicado en su blog.
Otras medidas
Pero otro punto que también destacó Reyes fue la reducción del deslizamiento cambiario del 5 al 3 por ciento, anunciado en octubre de 2019, que lo mencionó como una de las razones de la tendencia de la inflación hacia la baja. No obstante, para Marenco, aunque es una buena política, en realidad, hay otros factores propios del comportamiento de la pandemia, ya que al tener menor cantidad de personas movilizándose, por el autoconfinamiento, la demanda disminuyó y por ende los precios también. Él considera que la pandemia en si misma conllevaba a un efecto deflacionario, y no tanto las medidas específicas que señala el presidente del máximo emisor bancario.
Sin embargo, el presidente del BCN mantuvo que “(…) este resultado evidencia que las políticas implementadas en el campo productivo y de política monetaria y cambiaria han sido las apropiadas, favoreciendo precios bajos que beneficiaron el poder adquisitivo y la reducción de los costos”, expresó.
Finalmente, el BCN también resaltó que gracias al “desempeño de las variables del sector monetario y fiscal” se ha favorecido el fortalecimiento de las reservas internacionales brutas, alcanzando en septiembre un saldo de 2,907.6 millones de dólares, lo que representó una acumulación de 510.1 millones de dólares respecto al nivel de diciembre de 2019″.