El Real Madrid parece haber cobrado vida y devuelto la ilusión de poder ganarlo todo a pesar del empate 2-2 con el PSG. ¿Qué equipo estamos viendo? Eficacia ofensiva, control del mediocampo y sostenimiento atrás, al menos en 80 minutos del desafío. Son los mismos jugadores que meses atrás cargaban la cruz directo a la crucifixión. No obstante, han encontrado la línea, las ideas y todo está fluyendo. Masticaron en casa al PSG después de la noche oscura en París al caer 3-0, aunque la sensación final es dolorosa.
La tropa de Zidane ha jugado tan bien que hasta la construcción del gol fue de encanto, de poción mágica. Hazard sale con determinación, con una visión de juego espectacular, luego lo releva Federico Valverde, se acompaña con Carvajal, pero el uruguayo sigue de cerca para recibir nuevamente y encontrar a Isco. Tras el disparo que golpea en el poste, aparece Benzema para establecer el gol en el remate al 17’.
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Pero eso no era suficiente. Si el Madrid no terminó goleando y vengando el pasado fue por culpa de Keylor Navas. El tico se creció en lo que fue su casa. Al 26’ tapó un misil de Kroos, al 31’ otro de Kroos, al 38’ Carvajal ya celebraba y Navas lo hizo de nuevo y todavía en la recta final de la primera parte, el tico le arrebató el cántico del gol a Marcelo. Simplemente, Navas parecía modelar lo que el Madrid tuvo y decidió perder.
La jugada clave del encuentro ocurrió al 42’. Courtois sale tardíamente en un pase adelantado a Icardi, se olvida del balón y golpea al argentino. Era penalti claro, pero el árbitro había tomado la decisión de expulsar al belga. Daba la impresión de que el caos había nacido, sin embargo, el VAR evitó la pesadilla, enfocándose en el inicio de la jugada con la falta de Gana a Marcelo, el resto es como si ni hubiese ocurrido.
En la segunda parte, el dominio fue el mismo: el Madrid intentando una y otra vez y Navas rechazando. Benzema clavó el segundo y todo indicaba la muerte del PSG, pero salió de la tumba sin ningún brillo, sino con errores. Enredo entre Courtois y Varane, le dio el primero a Mbappé (81’) y dos minutos después un desvío defensivo le dio el empate en los pies de Saravia.