Al igual que Bosawas, la Reserva Biológica Indio Maíz está siendo depredada por los colonos, que destruyen sus recursos naturales. Condenándola a desaparecer para siempre, según especialistas.
A esta conclusión llega, por ejemplo, el ambientalista Jaime Incer Barquero, quien asegura que el área de amortiguamiento de Indio Maíz es la más invadida, pero también ya conoce de la misma situación en su zona núcleo, sin que las autoridades nacionales pongan en marcha acciones que frenen el acelerado deterioro.
“Ese lugar, al igual que Bosawas, está abierto al saqueo, a la extracción de madera, a la destrucción de la flora y fauna, en contradicción del compromiso que Nicaragua adoptó de ser esa una reserva de biósfera de carácter internacional, avalada por Unesco”, criticó Incer Barquero.
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Estas declaraciones del científico nicaragüense las brinda luego de que los gobiernos comunales de Greytown, Corn River e Indian River presentaron en Managua el plan de acción para la protección y uso sostenible de la Reserva Biológica Indio Maíz, donde se menciona las problemáticas, que según las personas que participaron en las consultas para elaborar el documento, la principal es la invasión de los colonos que deforestan y contaminan el agua, realizan extracción arqueológica, explotación minera, pesca ilegal y caza.
En el lanzamiento del plan de acción, Jossely Flores, tesorero comunal de Indian River, realizó una exposición del mismo, donde aparece que la invasión de los colonos abarca entre un 20 y 30 por ciento del total de extensión de Indio Maíz.
“Asimismo, existe la amenaza personal hacia nuestros guardabosques, a la que se enfrentan día a día cuando realizan sus monitoreos, su investigación, su patrullaje, ellos enfrentan muchos riesgos, muchas amenazas por personas que se encuentran en la reserva, muchos de ellos realizan actividades ilegales y muchos de ellos también portan armas”, relató Flores, para dimensionar la gravedad de la colonización en Indio Maíz.
Situación empeoró con el incendio
En abril de 2018 ocurrió un incendio en Indio Maíz y las instituciones estatales se mostraron indolentes ante la emergencia. Esto creó un masivo rechazo en la población y principalmente en los jóvenes, decidiendo salir a las calles en demanda de una respuesta.
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El siniestro fue sofocado, dejando 5,945 hectáreas quemadas.
Incrementó el daño
Eso no es todo. Incer Barquero asegura que desde entonces la destrucción de Indio Maíz se ha incrementado porque “todas las trochas que abrió el Ejército, con pretexto de apagar el fuego, son ahora vías de penetración para la colonización incontrolable y para la extracción de los recursos, especialmente madera, que ahí existe. Esa es la gran contradicción, que supuestamente un control bueno dejó abiertas las posibilidades para saquear los recursos naturales”.
Esto es consecuente con una carta que elaboraron las tres comunidades y que se le dio lectura, por su parte, en la presentación del plan de acción.
“Nos encontramos sumamente preocupados por el grado de silencio e inoperatividad que el Estado de Nicaragua ha tenido para asuntos de protección de la Reserva Biológica Indio Maíz y nuestras denuncias, que en reiteradas ocasiones hemos hecho sobre la invasión y la destrucción de la zona núcleo de la reserva y nuestras tierras comunales”, leyó Orlando Joseph, comunitario de Greytown.
Acciones que proponen para la protección
El plan de acción, que tiene como fecha tope de aplicación el año 2020, señala que es necesaria la rotulación y puestos de vigilancia, monitoreo y conservación de la biodiversidad por parte de los guardabosques.
Otro es regular la pesca y todo tipo de cacería. Además controlar el uso de la madera por la deforestación, que destruye el hábitat de los animales y controlar también el número de ganado doméstico en Indio Maíz.
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Por último, habilitar y potenciar la investigación a través del turismo científico y el monitoreo. La educación y concientización del cuido y la conservación de la reserva, porque de no hacerlo, en el futuro no quedará ni para contar el cuento.