El juez orteguista Ernesto Rodríguez Mejía, titular del juzgado Sexto Distrito Penal de Juicio de Managua, inició este jueves el juicio contra los autoconvocados Irvin Donaldo Escobar Ortiz, odontólogo y los estudiantes David Salvador López Artola y Crisffer Steven Bustos Molina, ellos estuvieron atrincherados en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (Unan-Managua) entre mayo y julio pasado, en protesta contra el régimen de Daniel Ortega.
Ahora están siendo acusados de portación y transporte ilícito de armas, según detalló su abogada Yonarqui Martínez.
Ayer durante el primer día de juicio pasó a declarar el inspector Felipe Matute, detective de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), quien declaró que había recepcionado la denuncia contra los procesados y luego dijo que participó en la detención de los mismos.
Además, dijo que el día 14 de julio, día en que fueron capturados los jóvenes, el odontólogo conducía un vehículo color azul que había salido de la Unan y luego del hospital Metropolitano y en el asiento delantero supuestamente llevaba una escopeta, debajo del asiento llevaban tres armas de fuego y dos armas artesanales.
El juicio fue suspendido por falta de testigos y continuará el próximo 28 de noviembre.
Caso Diriamba
Mientras en otro juzgado se desarrolló el juicio contra los diriambinos Orlando y Henry Valverde Ortiz, Richard Sebastián López y Eddy Gertrudis González Padilla, miembro de la diversidad sexual. Los acusan de terrorismo, robo agravado, daño agravado, incendio, entre otros delitos.
En el inicio del juicio pasó a declarar el oficial Código Uno que supuestamente era testigo presencial de los hechos, pero la defensa Karla Sequeira expresó que en juicio se dio cuenta que es testigo referencial, porque el oficial le dijo al juez que no estaba en el lugar del hecho, solamente expresa que obtuvo la información por parte de una fuente que él tiene.
“No vio nada de los supuestos hechos que le están imputando a los señalados de estar en los tranques”, denunció la abogada defensora Karla Sequeira, asesora legal de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH).
Según la Fiscalía, estos pobladores junto a otros más saquearon y quemaron la delegación de la Policía Nacional en Diriamba. Además, se les señala de haber rafagueado la delegación policial atentando contra la vida de 14 efectivos que se encontraban acuartelados entre el 11 y 13 de junio en dicha unidad, por orden presidencial.
El ataque supuestamente duró más de cinco horas y fue hasta la madrugada del 13 de junio, que los policías tuvieron que abandonar la delegación, lo que fue aprovechado para saquear y robar, destruir el edificio, y quitar los candados de las celdas donde se encontraban 20 detenidos acusados por delitos como robo, violación y homicidio.
Supuestamente el Código Uno se mezcló entre los pobladores y logró identificar que Eddy y Richard, se encargaban de pagar a los delincuentes que estaban en los tranques y siempre portaban un fusil AK.
El juicio fue suspendido en horas de la noche.
PO se robo dinero de prestamista
El 9 de julio, un día después del ataque a los tranques de Carazo por paramilitares y policías, estos allanaron la vivienda de los hermanos Valverde, donde supuestamente encontraron armas industriales, armas artesanales y hasta el comedor que supuestamente fue sustraído el día de la quema de la delegación de Diriamba.
También se allanó la vivienda de EddyGonzález Padilla y Richard López de donde paramilitares se llevaron 35 mil dólares y 55 mil córdobas, porque este tiene años de ser prestamista y se le robaron su capital de trabajo, afirmó su hermana Tania Sánchez.
De la casa también extrajeron electrodomésticos. Sin embargo, el Código Uno declaró que con ese dinero, “pagaban a los delincuentes de los tranques”.
En este proceso, la Fiscalía ha propuesto unos 10 testigos de cargo, además de pruebas documentales y periciales. Para ayer se tenían previsto declararan seis policías más contra los enjuiciados. La Fiscalía también señala que desde Managua llegaban a dejar armas industriales a los tranques de Carazo.