El Arzobispo de Managua fue designado por el Secretariado del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) para presidir una Comisión que le dará seguimiento a la grave crisis que vive Venezuela y que ha dejado un saldo de más de 40 muertos por la represión gubernamental y que el Celan responsabiliza como único culpable al presidente Nicolás Maduro.
Durante el encuentro que se efectuó en El Salvador, el cardenal Leopoldo Brenes ha sido delegado por esa organización para que le de seguimiento a la crisis del país bolivariano.
Los obispos durante su encuentro lamentaron la crisis que vive Venezuela, en la que aún no se observa una solución.
“Venezuela está viviendo una terrible crisis humanitaria, el gobierno está cometiendo un error con la propuesta de la Asamblea Constituyente que todos los ciudadanos rechazan”, explican los obispos en una declaración en El Salvador, dónde estuvieron reunidos entre el 9 y el 12 de mayo.
La dura posición de los obispos latinoamericanos, se ha producido después de que la Asamblea del Celam escuchara el informe del Presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela, monseñor Rafael Diego Padron, quién también integra la comisión
La crisis la ha denunciado monseñor Cástor Oswaldo Azuaje Pérez, obispo de Trujillo (Venezuela), en una entrevista telefónica a LA PRENSA, subrayando que la situación del país es dramática y que Venezuela está siendo gobernada por una “dictadura civil-militar”.
Mientras el obispo de Trujillo denuncia la política del gobierno que sigue provocando manifestaciones y protestas entre la población todos los días, los obispos de toda América, reunidos en San Salvador, han decidido pronunciarse contra el gobierno de Maduro, al que consideran como único responsable de la falta de comida y medicina.