México / ACAN-EFE
El gobierno mexicano prevé invertir 120,000 millones de pesos (unos 9,167 millones de dólares) en la construcción de un nuevo aeropuerto internacional para Ciudad de México, contiguo al actual, que está al límite de su capacidad de 32 millones de usuarios anuales. La nueva terminal tendrá capacidad para dar servicio a 120 millones de viajeros cada año.
El presidente mexicano Enrique Peña Nieto ha incluido el tema del nuevo aeropuerto en el informe de gestión de su segundo año de Gobierno que presentó ayer en un acto en el Palacio Nacional y que fue publicado con anterioridad en la página web de la Presidencia.
Diversos estudios “determinaron que el lugar más adecuado para establecer las nuevas instalaciones del aeropuerto de la Ciudad de México se sitúa en la zona contigua del actual”, señaló Peña Nieto.
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Esta obra de infraestructura “no requerirá terrenos adicionales a los actualmente disponibles, los cuales son propiedad del Gobierno Federal”, precisa el informe de gestión.
La nueva terminal aérea “exigirá el concurso de los mejores especialistas para ejecutar una inversión pública calculada en 120,000 millones de pesos (unos 9,167 millones de dólares)”, añade.
El informe enviado el lunes al Congreso mexicano, recuerda que desde hace décadas se detectó la necesidad de contar con nuevas instalaciones aeroportuarias en la capital mexicana, ante la limitada superficie de las actuales.
En el informe el presidente argumenta que la saturación operativa de las actuales instalaciones restringe “significativamente la conectividad nacional e internacional del país, afectando el turismo y la generación de nuevas inversiones y de empleos”.
La nueva terminal contribuirá “a desarrollar económica y socialmente una de las regiones más densamente pobladas y con un alto grado de marginación”, señala el informe de gestión. Además, resalta, “el desarrollo del proyecto permitirá que surja un importante polo generador de empleos, de derrama económica y nuevas oportunidades para la población de la zona”.
En 2007, el aeropuerto de Ciudad de México fue remodelado y ampliado con un edificio adyacente, la terminal dos, después del fracaso del proyecto para construir uno nuevo en la localidad de San Salvador Atenco, pero ya está cerca del límite de su capacidad, 32 millones de usuarios.
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