Noel Amílcar Gallegos
El olor a pólvora y la alegría “invadieron” las calles por donde iba pasando la venerada imagen de San Jerónimo, “¡el que cura sin medicina!”, grita una señora desde la ventana de una casa, mientras miraba pasar el mar de gente que acompañaba a “Chombito”.
El santo patrono de los masayas hará su entrada triunfal hoy al templo de este mismo nombre, luego de pasar en las calles en una jornada de más de 24 horas. La procesión fue apoteósica.
Hoy los cuerpos extenuados de los cargadores ofrecerán sus últimas energías para dar cumplimiento a la entrada del también llamado “Rey de la montaña”, por ser llevado sobre una peaña cargada de vegetación de diferentes colores.
“Yo vengo a estas celebraciones desde cuando mis padres me traían muy pequeña y así sigo la tradición con mi familia. Este santo es muy milagroso, yo lo recomiendo al igual que nuestro Arcángel San Miguel, el protector de todas las dificultades de toda Masaya”, dijo doña Vilma Monge, quien llegó acompañada de su familia y amigos.
San Jerónimo fue acompañado por la imagen de San Miguel, que lo identifican como su fiel amigo.
Después de la octava, los festejos culturales se desarrollan todos los domingos hasta el último de noviembre; en este mes el baile de Negras luce sus mejores trajes de galas así como los diablitos que salen a danzar.
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