LA PAZ/AFP
El exdictador boliviano Luis García Meza, condenado a 30 años de cárcel, devolvió dos de las tres celdas que poseía en un penal de máxima seguridad, cercano a La Paz, tras ser conminado por autoridades carcelarias, informó este sábado una fuente oficial.
“El señor García Meza ha devuelto las celdas que tenía, se ha hecho la revisión y se ha visto que nadie puede tener derechos”, afirmó el director de Régimen Penitenciario, Ramiro Llanos, entrevistado por radios locales.
El propio Llanos había conminado días atrás a García Meza, de 83 años, a que sólo debía poseer una celda de 4×4 metros, pues él hizo ampliar su espacio, construyendo en años anteriores dos ambientes más, donde poseía una cocina y un gimnasio, ante la permisividad de sus carceleros. Incluso en su baño tenía un jacuzzi de uso personal.
García Meza, quien gobernó en 1980 tras un cruento golpe de estado, se encuentra internado por cáncer en el hospital militar de La Paz, donde recibe tratamiento especializado de manera esporádica y luego debe volver a prisión.
El exgeneral está preso desde 1995, tras ser sentenciado dos años antes a la máxima pena de 30 años sin derecho a indulto, por violación a los derechos humanos y otros delitos.
Su lugarteniente durante su gobierno, el excoronel Luis Arce Gómez, cumple igual condena.
Otros militares y paramilitares fueron sentenciados a penas menores.