Roberto Mora
Ayer estaba programado el juicio contra los 11 productores de Condega, quienes formaban parte de un grupo de aproximadamente 500 personas que exigían al Gobierno el cumplimiento de los acuerdos firmados en días anteriores, que establecía mejor pago por su producción de frijoles.
[/doap_box]
Este grupo de productores realizó protestas para exigir un mejor pago por quintal de frijol, que todavía es comprado por comerciantes a 650 córdobas y por Enabas a 800 córdobas.
Todos fueron acusados por los delitos de obstrucción a las funciones, daños materiales agravados y lesiones leves.
¿BUSCAN SALIDA?
Fuentes judiciales informaron que el juicio se suspendió porque los productores estaban en negociación con el Ministerio Público y la Procuraduría, con el fin de llegar a un acuerdo, principalmente estableciendo el pago de la ambulancia quemada durante las protestas y que el Estado valoró en 47 mil dólares.
Cuando decidieron protestar a finales de agosto, los productores de Condega, quienes estaban sembrando con altos costos por el precio de los insumos, dijeron estar cansados por las pérdidas que según ellos estaban teniendo por el precio que les estaban pagando por el quintal de frijol.
El Gobierno a través de algunos de sus ministros y directores lograron desmontar una primera protesta a través de una negociación y firma de acuerdos que les traerían a los productores mejores precios para sus cosechas. Sin embargo el quintal de frijol siguió vendiéndose a un máximo de 650 córdobas.
Ante el supuesto incumplimiento, los productores volvieron a protestar, pero ya no eran los más de dos mil que iniciaron el tranque la primera vez, sino unos 500 que fueron reprimidos por la Policía.
Ver en la versión impresa las páginas: 7 A