Saúl Martínez
En “muy mal” estado de salud se encuentra una joven estudiante, de 16 años, que presuntamente se practicó un aborto. La criatura de siete meses fue lanzada al fondo de una letrina.
Cándida Rosa Mendoza, vecina del lugar, lamentó el caso porque señaló que se debe de amar a los hijos que vienen al mundo.
[/doap_box]
Los vecinos del reparto El Progreso número 3, de Chinandega, se mostraron sorprendidos por la noticia. La subcomisionada Mercedes Argeñal, jefa de la Comisaría de la Mujer, Niñez y Adolescencia, informó que la adolescente fue trasladada al hospital e intervenida en dos ocasiones la tarde del domingo.
La joven estudia tercer año de secundaria en un centro educativo de la zona. Las autoridades policiales avanzan con las investigaciones y trataban de conocer si la joven actuó sola.
La progenitora de la adolescente se mostró muy adolorida al presentarse a la delegación policial.
Cerca de las 11:00 a.m. de ayer llegaron hasta la casa de la adolescente un perito de Auxilio Judicial, un representante de la Comisaría de la Mujer y el forense Róger Pereira Umaña, quienes valoraron que por el estado de descomposición de la criatura, el hecho pudo ocurrir la noche del sábado o madrugada del domingo.
GOLPES Y HERIDAS
La revisión forense se efectuó en el patio de la humilde casa del reparto descrito, ante la presencia de curiosos.
El informe detalla heridas circulares en el muslo izquierdo y parte lateral del tórax.
“Esta bebé murió dentro del útero, hay tres lesiones, pero debe investigarse si fue ella (la adolescente) quien se las hizo con algún instrumento. Es una hipótesis si hubo aborto provocado”, dijo el forense.
Ver en la versión impresa las páginas: 6 A
