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Muere presunto homicida de cinco personas en oeste de México

El presunto homicida de cinco personas que fueron enterradas en fosas clandestinas en diciembre pasado en Guadalajara, murió por complicaciones en el hígado debidas a la Hepatitis C que padecía, informó hoy la Secretaría de Seguridad Pública del occidental estado de Jalisco.

Guadalajara, México/EFE

El presunto homicida de cinco personas que fueron enterradas en fosas clandestinas en diciembre pasado en Guadalajara, murió por complicaciones en el hígado debidas a la Hepatitis C que padecía, informó hoy la Secretaría de Seguridad Pública del occidental estado de Jalisco.

Gerardo Flores Gómez, alias “El Tatuado”, quien estaba preso en el penal de Puente Grande desde el 8 de febrero, fue trasladado ayer al Hospital Civil de Guadalajara, debido a que presentó problemas de salud “debido al padecimiento de Hepatitis C”, afirmó la dependencia en un comunicado.

Al ser internado en el hospital “El Tatuado” sufría además de “neumonía e insuficiencia respiratoria” y finalmente murió la madrugada de este sábado a causa de “un shock” derivado de la hepatitis, confirmó la Secretaría de Seguridad Pública.

El pasado 7 de febrero tras entregarse de manera voluntaria, “El Tatuado” confesó haber asesinado con un cuchillo a dos de los cinco estudiantes encontrados en fosas en las instalaciones de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG).

El presunto culpable, quien era buscado por las autoridades de justicia desde diciembre, declaró además que “remató” a una de las víctimas “disparándole con arma de fuego”.

A mediados de diciembre pasado las autoridades encontraron sin vida a cuatro adolescentes y al padre de uno de ellos en fosas clandestinas en las instalaciones de la FEG, días después de que se denunciara su desaparición.

Al parecer, las víctimas se habían dirigido a la red estudiantil para pedir una reducción de una cuota que pagaba el padre de familia por vender sus productos a la puerta de un colegio.

“El Tatuado” habría sido quien discutió y con el padre de familia y su hijo y luego los trasladó a la oficina de David Castorena, presidente de la red estudiantil, desde donde se escucharon disparos de arma de fuego. Flores Gómez tenía antecedentes penales por robo de vehículo y homicidio “en grado de tentativa”, por los que estuvo preso durante cuatro años y medio hace 20 años.

El cuerpo del presunto homicida fue trasladado al Servicio Médico Forense en espera de ser reclamado por su familiares.

Internacionales El Tatuado México archivo

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