La incidencia de los accidentes de tránsito en los países de Latinoamérica no sólo está relacionada a la falta de educación vial, sino también a la infraestructura que existe en los países de la región, sostiene la consultora del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en materia de seguridad vial, Karla González.
La también ex ministra costarricense de Transporte insistió en que la infraestructura vial incide mucho en los accidentes de tránsito, pues los costos de las construcciones de las carreteras aumentan un 20 por ciento más cuando incluyen elementos de seguridad vial.
“Lo que hacemos los países latinos es recortar esa parte. Entonces las carreteras muchas veces, y en algunos países, se convierten en trampas mortales. Simplemente asfaltamos una carretera que antes era lastre, empiezan a rodar el carro muchísimo más rápido y la gente que antes caminaba por allí, sigue haciéndolo de manera insegura”, sostuvo la experta.
- La consultora del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en materia de seguridad vial, Karla González, explicó que la recopilación de los datos de la Caravana de Seguridad Vial serán evaluados.
Se trata de auditorías de seguridad vial, pues se midió la rugosidad de la carretera como por ejemplo, si una curva tiene sentido y cómo interactuaban los peatones, los ciclistas y los vehículos para determinar el grado de peligro que existe en el Corredor.
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ES UNA EPIDEMIA
A criterio de la consultora del BID, la población más vulnerable a los accidentes automovilísticos en países como los de la región son los peatones y los jóvenes, tras indicar que los accidentes se han vuelto una epidemia.
“Nuestro continente está poniendo los muertos en el tema de accidentes de tránsito, en el mundo”, sostuvo González.
La ex ministra costarricense consideró que hay muchas formas de evitar los accidentes, aunque los pueblos latinoamericanos se han acostumbrado a creer que los mismos son causa del destino, lo cual no es verdad, pues este tipo de percances son provocadas con aptitudes de la población.
“A veces educamos a los niños para que aprendan a cruzar la calle, pero nos olvidamos de los jóvenes para que no tomen licor cuando manejan. A veces nos ocupamos de la parte de capacitar, a que sepan manejar un auto (por ejemplo), pero tan pronto tienen mediodía de tener una licencia, ya se van solos en una carretera de muchos kilómetros”, apuntó González.
COSTO SOCIAL Y ECONÓMICO
“Se nos están muriendo las personas antes de cumplir los 35 años, en su mayoría. Eso quiere decir que si no hacemos algo para parar esta epidemia, vamos a tener una fuerza laboral muy afectada”, dijo la experta en declaraciones a LA PRENSA ayer en Managua.
Al mismo tiempo mencionó que, según estimaciones, por cada muerto en accidente, cinco quedan discapacitados.
Y aunque aclaró que esto no es igual en todos los países, se considera que hay una tendencia hacia eso, lo que significa que el país y las propias familias de las víctimas tienen que destinar recursos para atender a los discapacitados.
PROYECTO REGIONAL
El BID ejecuta un proyecto conocido como Caravana de Seguridad Vial, cuya primera fase ya fue efectuada y abarca desde Puebla, México, hasta Panamá.
A través de esa primera fase realizaron un estudio en el corredor Pacífico, de una longitud de más de tres mil kilómetros. En ese corredor se transporta el 95 por ciento de la mercancía de toda Mesoamérica.
La intención es que ese corredor, o al menos algunos de los tramos más peligrosos hasta ahora, puedan contar con una mayor seguridad vial, incluyendo aceras, puentes peatonales y carriles para adelantar.
De esa manera se pretende que, por ejemplo, los escolares y camioneros puedan transitar esas carreteras con toda seguridad.
Los análisis determinarán por cada kilómetro que ha sido estudiado cuáles son las mejoras que tienen que hacerse.
Los resultados serán presentados a las autoridades de cada país, especificando los puntos o tramos de la carretera que requieren inversión pública para mejorar la seguridad vial en cumplimiento con los estándares internacionales.
En segunda fase el BID propondrá a cada país, a dónde debería hacer las inversiones. Los gobiernos tomarán las decisiones de las obras que podrían ser incluidas en el Programa de Inversiones de cada nación.
En Nicaragua se evaluaron alrededor de 160 kilómetros de carreteras ubicadas en el Pacífico.
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