El misionero católico Alberto Boschi recurrió ayer ante el Ministerio de Gobernación (Migob) para solicitar que se revise la decisión de suspenderle la nacionalidad nicaragüense.
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El funcionario del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Uriel Pineda, quien acompañó a Boschi, manifestó que la resolución del Ministerio de Gobernación en ese caso fue una actuación arbitraria, pues no se siguió el procedimiento adecuado y es causa de indefensión para éste.
Con ese recurso administrativo “se procura activar el mecanismo respectivo para establecer el derecho que él (Boschi) tiene de ser nicaragüense”, expresó el funcionario del Cenidh, quien destacó que Boschi tiene una hija en Nicaragua.
De esta manera, el Ministerio de Gobernación tiene 20 días para resolver y en caso de que haya silencio administrativo, Pineda dijo que podrán recurrir de amparo ante los tribunales de apelaciones. Esto, dijo, “por la vulneración que se ha hecho en el derecho como nicaragüense que (éste) tiene”, por la indefensión en que ha sido dejado y la actuación arbitraria por parte de esa institución.
El 23 de junio el Ministerio de Gobernación emitió un comunicado, a través del cual confirmaba que despojaba de la nacionalidad a Boschi; dos días después fue publicado en La Gaceta, Diario Oficial. Boschi nunca fue informado por escrito, sino de manera verbal, al ingresar al aeropuerto internacional Managua.
“Hay una voluntad de sacarme del país y no permitir que siga con mi trabajo social en Ciudad Sandino”, sostuvo Boschi.
En el Migob Boschi únicamente alcanzó a llegar a la recepción, donde la persona a cargo recibió el documento aduciendo que ninguna de las autoridades de ese ministerio se encontraba en ese momento.
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