CORRESPONSAL/LEÓN
La furia y repudio en contra de los expendios de droga en la ciudad de León se pudo apreciar ayer en una marcha convocada por la Comisión de Lucha contra las Drogas, en la que algunos manifestantes destruyeron puertas, persianas y verjas y también pintaron y mancharon con aceite negro las fachadas de los supuestos expendios de droga.
Durante la marcha estudiantes se enfrentaron a pedradas con varias personas expendedoras de droga, pero los estudiantes —principalmente universitarios—, que eran un número superior, respondieron con los famosos morterazos aunque sin causar daños humanos.
En lo que va del año 54 personas han sido detenidas por vender estupefacientes, de las cuales 39 fueron sentenciadas con faltas penales según las autoridades policiales.
En el departamento de León hay registros de 43 expendios de droga, de ellos 37 operan en la ciudad.
Douglas Zeledón Largaespada, jefe de la Policía de León, dijo que la marcha se realizó para conmemorar el Día Internacional de Lucha contra las Drogas.
“Diseñamos una ruta de marcha (en la que) se encuentra más del 30 por ciento de los expendios de droga que hemos descubierto y que son públicos”, dijo Zeledón.
“Todos los que participamos y la población misma repudiamos a estos comerciantes de la muerte, delincuentes que trafican con la salud de nuestros jóvenes y que atentan contra la vida de las personas y contra ellos mismos, ya que varios de ellos han fallecido por tragarse varias piedras de crack”, dijo Zeledón.
“Estos expendios venden en pequeñas cantidades, pero la mayor cantidad la tienen dispersa o enterrada y cuando nosotros los agarramos encontramos poca cantidad (de droga) y eso les permite salir fácilmente de un juicio. (Pero) no vamos a descansar, vamos a quebrar a todos los expendios de droga que existen en León”, señaló Zeledón.
En la actividad participaron personas de todos los estratos de León, desde transportistas, estudiantes hasta funcionarios del Ministerio Público, entre otras instituciones.
En varias ocasiones la Policía ha organizado este tipo de marcha y como resultado tres personas que se dedicaban a la venta de droga por vergüenza dejaron de vender.
Ayer Carolina Sánchez, de 20 años, quien se encontraba dentro de una de las casas que fue cargada a morterazos, dijo que los manifestantes eran “unos maleducados hijos de p Yo no vendo droga chiquito, voy a poner una denuncia en contra de esos vulgares”, dijo.
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