WASHINGTON/AFP
Estados Unidos no considera que el retorno del ex presidente Manuel Zelaya a Honduras sea un “tema crítico” para readmitir al país en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA), declaró este viernes el secretario de Estado Adjunto para América Latina, Arturo Valenzuela.
“A mi entender esto no es un tema crítico en estos momentos; algunos países creen que (Zelaya) debe volver, eso es seguro”, declaró Valenzuela en rueda de prensa en vísperas de la asamblea general de la OEA y del viaje de la secretaria Hillary Clinton a Lima.
“Creo que el presidente “(Porfirio) Lobo ha tomado pasos al respecto, alentando al propio presidente Zelaya (a volver)”, añadió el responsable para América Latina del Departamento de Estado.
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, declaró el jueves que “el tema central es el retorno del (depuesto) presidente Manuel Zelaya a Honduras”, para que dicho país vuelva al seno de la organización.
Insulza enfatizó en Lima que “el retorno (de Zelaya) permitiría avanzar en el retorno de Honduras a la OEA”, y recordó que una orden de detención contra el depuesto ex presidente en su país le impide volver.
Diversos países en la OEA consideran que Honduras debe tomar pasos adicionales para normalizar la situación, reconoció Valenzuela. “Esta no es la posición de Estados Unidos”, puntualizó acto seguido. Valenzuela reconoció sin embargo que subsisten “preocupaciones” en torno a diversos aspectos del respeto a los derechos humanos.
En todo caso, Honduras no formará parte de los debates de la asamblea general de la OEA que se inicia el domingo por la noche y que durará hasta el martes 8, explicó Valenzuela, en la misma sintonía que Insulza.
“Es un tema que se va a discutir al margen” de la reunión, explicó.
Clinton llegará el domingo a Lima, y mantendrá una serie de reuniones bilaterales que Valenzuela no detalló, además de un encuentro con el presidente Alan García.
Luego la jefa de la diplomacia estadounidense viajará a Ecuador, Colombia y Barbados.
En la agenda de la asamblea general, dedicada oficialmente al tema de la seguridad y el control de armamentos, estará también el asunto de su reforma interna y del presupuesto, un “desafío”, aseguró Valenzuela.
Estados Unidos contribuye con un 60% al presupuesto de la organización y quisiera que otros países contribuyeran más, y que se hallen nuevas formas de hallar dinero, dijo Valenzuela.