- Aunque ya no domina como antes lo hacía
Edgard Tijerino M.
¿Recuerdan aquel chavalo que con la serenidad de Tom Seaver y la violencia de Nolan Ryan trabajó nueve entradas perfectas contra los Padres de San Diego en 1995?
Ese Pedro Martínez de los Expos de Montreal, tenía apenas 24 años, y resultaba fácil adivinar que sería un ganador de por lo menos tres premios Cy Young y que lo esperaba un gran contrato en la vuelta de la esquina.
Por largo tiempo, el derecho dominicano ha permanecido en la cima de la montaña enviando mensajes macabros y desmoralizando al enemigo, pero ya no es el mismo, de eso, todos están claros. Incluso él, sin la menor duda.
Este Pedro, casi inutilizado frente a los Yanquis, con un preocupante 5.40 en carreras limpias durante 20 entradas en la actual postemporada, tratará de empujar esta noche a los Cardenales a la orilla de la fosa.
Una desventaja de 3-0, sería mortal para San Luis. Cierto, no lo fue para los Medias Rojas frente a los Yanquis de Nueva York, pero las rarezas son exactamente eso, algo extraño, a veces sin precedentes.
Terry Francona le entregará la pelota y seguramente le dirá “tú eres Pedro, y en la sabiduría y fortaleza de este brazo, descansan las posibilidades de abofeatear la maldición del Bambino. Así que, no falles”.
Hay sed de venganza en la tropa de Tony LaRussa. Ellos tienen un gran significado ofensivo, y Curt Schilling junto con el pitcheo de relevo de Boston, los domesticaron en el Juego 2, reduciéndolos a polvo de ladrillo, con excepción del ímpetu de Alberto Pujols.
Regresando a casa, “las fieras” de San Luis están desempolvando su ferocidad y se preparan para arremeter contra este Pedro, ahora de 33 años, a quien se le ha perdido respeto pese a sus 16 victorias y 227 ponches en la temporada.
Afectado en su brazo, Martínez fue sometido a un tratamiento, perdiendo poder y dominio. Justo en un momento en que necesita pitchear más con la cabeza que con su látigo, el dominicano se coloca en el “ombligo” de las expectativas, buscando una actuación revitalizadora.
Jim Edmonds está bateando 255 en la postemporada, en tanto Scott Rolen nada debajo del agua con 184 puntos, Tony Womack registra 220, Mike Matheny 205 y Reggie Sanders 195. Todos entre escombros.
Pero nunca subestimados. ¿Hay algún pitcher que desee enfrentar a Edmonds o Rolen en un momento crucial? Ni lo busquen.
Si Pedro falla, “la maldición” no entrará a la sala de cuidados intensivos y volverá a cobrar vida y amenazar, como una víbora desperezándose, con sus ojos bien abiertos.
Eso quieren evitar los Medias Rojas, cuyos bates estarán en pie de guerra contra Jeff Suppan, un ganador de 16 juegos con 4.16 en efectividad. No propiamente un pitcher para convertir en postres los bates de David Ortiz, Manny Ramírez, Johnny Damon, John Varitek, Bill Mueller y Mark Bellhorn, que han estado encendidos.
“Vamos, tú eres Pedro”, le gritará Terry Francona hoy.
Sí, es Pedro, pero no el temible que nos llegó a asombrar. Ya veremos si puede socar.
El tercer partido de la Serie Mundial está programado a iniciar hoy desde las 6:30 p.m. en el Bush Stadium de San Luis.
TERCERA BATALLA
Los de San Luis tienen a Pujols con 440 y Larry Walker con 302.