Martha Danelia Corea [email protected]
En la época colonial San Juan de Oriente fue conocida como San Juan de Platos, identificando la producción artesanal a base de barro, principal materia prima para la fabricación de las cerámicas.
El barro es extraído de grandes huertas que existen en el municipio que posee un terreno arenoso y arcilloso, el cual juega un papel determinante en la historia artesanal del lugar.
El barro se moldea en trozos pequeños que son remojados, al día siguiente, cuando alcanza la suavidad deseada, se mezcla con arena de arroyo, proceso que se realiza con los pies por espacio de tres horas.
Luego se procede a escoger manualmente las piedras o raíces que puedan contener la mezcla. La segunda etapa del proceso, que también es con los pies, es conocida como reamasado, quedando el barro listo para pasar al torno.
En el torno, dependiendo del tamaño y la forma que se tenga definido realizarse, se elabora una pelota de barro; una vez elaborada la pieza, se corta con un trozo de nylon, luego se pone a orear.
Cuando la pieza es alisada o pulida se procede a recubrirla con tagüe, conocido popularmente como engobe o barro negro. El engobe es diluido con agua y se tamiza repetidamente durante dos o tres días. Se aplican varios baños de barro negro a cada pieza. Éstas son puestas dentro de bolsas plásticas de uno a siete días para evitar que se resequen. Luego se realiza el proceso de pulido.
Al día siguiente se recubre con óxido de zinc (color blanco hueso), cada pieza se seca en un bolsa plástica de dos a diez horas, dependiendo del tiempo (verano, invierno).
Posteriormente se pasa al proceso de diseño y rayado que consiste en dibujar a mano con lápiz para gráficos una figura sobre la pieza directamente o a veces copiando imágenes dibujadas en papel.
Consecuentemente, se pasa al calado y relieve que consiste en rayar la forma grabada del dibujo.
Después la pieza es puesta en el horno artesanal (éste es construido con ladrillos de barro y para sujetarlo en el momento de la construcción se usa tierra negra porque ésta tienen suficiente óxido de hierro y amarra con excelente precisión), el proceso de quemado de cada pieza tarda dos horas a humo lento y tres horas a humo fuerte.
Al día siguiente las piezas ya están frías, comienzan a sacarse del horno una por una y se limpian con un paño de seda para que recobre su color y brillo.
Por lo general, los talleres trabajan de forma artesanal y familiar, aunque no existe un registro de cuántos empleos generan en el municipio, se consideran grandes generadores. Estos talleres pueden calificase como micronegocios, ya que son establecimientos que lo integran entre uno a cinco trabajadores, precisamente la cantidad mínima y máxima que emplea cada taller familiar.
TIPOS DE CERAMICAS
Los artesanos de San Juan de Oriente, explicaron que ellos trabajan varios tipos de cerámicas .
La cerámica precolombina, como su nombre lo dice, es la que tiene diseños precolombinos como indios mayas, la serpiente emplumada (Quetzalcoatl) o Xilonem, la diosa del maíz.
“La cerámica precolombina es la que trabajaban nuestros ancestros con pinturas y diseños que ellos elaboraban, y ahí dejaban reflejado lo que pensaban que podía ser la ciencia”, explica la ceramista Elsa Mercado.
La artesanía utilitaria es aquella hecha para el hogar como cafeteras, bandejas, tazones, platos.
Las creaciones libres son diseños provenientes de la imaginación de los artesanos, quienes plasman sus propias ideas en el producto que elaboran.
“Uno ya está acostumbrado a retener en la mente imágenes, entonces las usa (para elaborar las cerámicas)”, expresa Horacio Salazar, de la cooperativa Quetzalcoatl que funciona como un centro de exhibición en el lugar.
Según los artesanos, la cerámica que mayor demanda tiene es la de creación libre.
VALOR DE LAS PIEZAS
Los artesanos declararon que el valor de las piezas de cerámica está en dependencia de la forma, tamaño y estilo. Es así como los precios oscilan entre los 10 hasta los 500 córdobas.