- Tiene hasta el 21 de febrero del año próximo para abandonar la propiedad
- ¡Enhorabuena! Partes lograron arreglarse pacíficamente
Juan Ignacio Rosales [email protected]
El desalojo del teniente coronel del Ejército de Nicaragua, Guillermo Mendoza Castillo, de una vivienda ubicada en el Reparto Loma Verde, quedó suspendido luego que llegara a un acuerdo con Orlando Zúniga, representante de la propietaria del inmueble, su esposa la señora María Teresa Velásquez de Zúniga.
Al salir de la Procuraduría de la Propiedad, lugar donde ambas partes llegaron al acuerdo, LA PRENSA intentó conocer la versión del teniente coronel Mendoza Castillo y su representante legal, pero evadieron la entrevista y se limitaron a retirarse del lugar.
Por su parte Orlando Zúniga comentó que luego de 10 años de litigio se llegó a un dictamen favorable para ambas partes. “Ya se hizo oficial la devolución de la propiedad”, explicó.
Agregó que para ambas partes existe una prórroga hasta el 21 de febrero del año próximo, por lo que el teniente coronel Mendoza Castillo puede estar en el inmueble hasta esa fecha, de lo contrario, iniciarán nuevamente los problemas.
CAPEARON EL BULTO
El señor Zúniga enfatizó que pese a que solicitó tres veces el apoyo policial “incluso por parte del embajador estadounidense (Oliver Garza)” para realizar el desalojo, no lo obtuvo.
Zúniga dijo que hasta cierto punto, pudo ser conveniente que no se llegara a un desalojo violento donde ambas partes pudieron resultar perjudicadas, insistiendo en que la Policía “no negó el apoyo, pero capearon el bulto”.
Enfatizó que agradece al teniente coronel Mendoza por su colaboración y entendimiento, así como a la embajada estadounidense, como a la Procuraduría de Justicia, y al alto mando del Ejército.
EFICIENCIA POLICIAL
Tres familias fueron desalojadas de una vivienda ubicada frente al Cementerio Occidental de Managua el 27 de noviembre pasado.
En esa ocasión, un bus con miembros de la Brigada Antimotines y seis patrullas de Policía se presentaron a apoyar la orden de la juez Ruth Chamorro.
Marvin Antonio Delgado González, uno de los afectados, opinó que con dinero muchas cosas son posibles, como el desalojo que sufrieron y la destrucción de su casa con una cargadora frontal (pala mecánica).