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Las cuatro piezas dentales que le desprendieron de una pedrada a Gerald Gabriel Fariñas Romero.

Otro pandillero que encontró la calma

“Patelora” murió luego de cuatro días de agonía en el Hospital “Lenín Fonseca” Mario Sánchez P. [email protected] Gerald Gabriel Fariñas Romero, el joven acusado de integrar la pandilla “Los Duendes” y azote del Barrio Batahola Sur, murió la noche del domingo en el Hospital “Lenín Fonseca” de Managua, luego de cuatro días de agonía tras […]

  • “Patelora” murió luego de cuatro días de agonía en el Hospital “Lenín Fonseca”

Mario Sánchez P. [email protected]

Gerald Gabriel Fariñas Romero, el joven acusado de integrar la pandilla “Los Duendes” y azote del Barrio Batahola Sur, murió la noche del domingo en el Hospital “Lenín Fonseca” de Managua, luego de cuatro días de agonía tras ser derribado de una pedrada que le desprendió cuatro piezas dentales, ser apuñalado cinco veces y al caer de espaldas con el arma enterrada a la altura del omoplato, ésta se la acabó de hundir.

La saña contra “Patelora” llegó a tanto que sus agresores también le dieron un machetazo en la mano izquierda y por poco le cortan de tajo los dedos.

El joven fue velado la noche del domingo en donde fue su casa, ubicada de la Escuela “Adrián Rojas” una cuadra arriba, en Batahola Sur, en el barrio que se encuentra al sur de la Embajada de los Estados Unidos, y sería sepultado la tarde de ayer lunes en el Cementerio Occidental, en el Barrio Monseñor Lezcano.

Por la agresión con lesiones graves que fue el delito inicial, la Policía capturó al joven Yáder Antonio Castillo Areas, quien dijo ser efectivo del Ejército acantonado en la base militar del kilómetro 9 de la carretera vieja a León.

Castillo Areas negó la autoría en la agresión a “Patelora”, de lo cual la Policía presentó un trozo de adoquín con el que le desprendieron las cuatro piezas dentales frontales que también fueron recogidas como prueba del delito.

Según la teniente Diana Murillo, vocera de la División Tres de la Policía, “Patelora” fue agredido durante un pleito de pandillas ocurrido a eso de las 10:30 de la noche del jueves, escenificado en el sector del Colegio “Adrián Rojas”, por la que se buscaba a otros involucrados.

Aunque la Policía no logró confirmar la denuncia de los vecinos, el joven Fariñas Romero se había convertido en el azote del barrio, en especial con las personas conocidas como “Los Pescados”, “Los Chayules” y “Los Gari”, quienes el jueves habrían silenciado para siempre a “Patelora”.

Yáder Antonio Castillo Areas, quien fue capturado, dijo que él no tiene nada que ver en la agresión contra Fariñas Romero, pero admitió que él caminaba con su primo Luis Sandino cuando estalló una trifulca en el barrio y “Patelora” le dio un morterazo en la espalda a su familiar y seguidamente un machetazo en una mano.

Agregó que mientras él atendía a Sandino, los vecinos atacaron a “Patelora” porque ya no lo aguantaban. En eso, mientras llevaba a su primo Sandino hacia un lugar seguro, encontró el mortero que andaba el pandillero y lo levantó.

“Fue entonces que llegó una patrulla de la Policía y me capturó al encontrarme con el aparato en la mano, pero yo no tengo nada ver con lo sufrido por ‘Patelora”.

“PATELORA” Y “EL PITUFO” DESCANSAN EN PAZ

Gerald Gabriel Fariñas Romero, alias “Patelora”, presuntamente miembro de la pandilla “Los Duendes” del barrio Batahola Sur, fue sepultado la tarde de ayer en el Cementerio Occidental de Managua.

Vecinos del Colegio “Adrián Rojas”, cercano a la casa donde vivía el hoy “Duende desaparecido”, lamentaron la muerte del joven, pero dijeron sentirse aliviados porque ya no seguirá sometiendo en angustia al vecindario.

Léster José Vasquez Reyes, alias “El Pitufo” era otro pandillero insoportable, traficante y consumidor de drogas del sector del barrio Pablo VI de San Judas, murió en la madrugada del 8 de octubre en el Hospital “Lenín Fonseca”, donde llegó agonizando al ser golpeado con un tubo de hierro, hecho del que se acusa a José Miguel Rivera Baltodano, “Chepe Huevo”.

Los vecinos lamentaron la muerte de “El Pitufo”, pero también aseguraron que era tiempo de que alguien calmara a este joven que constantemente cometía asaltos, agresiones y hasta crímenes. Él pereció durante el ataque a pedradas que su pandilla hizo contra la vivienda de “Chepe Huevo”.  

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