- Eje trasero de bus de la ruta 110 fue a parar “a la chingada”, ante el grito desesperado de los pasajeros y transeúntes
- Accidente deja dos personas
lesionadas y un equino renco
Moisés Martí[email protected]
El mal estado de la barra de transmisión de un bus de la ruta 110, placas 043-265, provocó que el eje trasero se quebrara, ocasionando un accidente en la entrada a la Colonia Primero de Mayo, el cual dejó un saldo de dos personas lesionadas, un caballo renco, y el enorme susto causado a los pasajeros de la unidad de transporte.
El accidente ocurrió al mediodía de ayer, cuando el bus venía en dirección este-oeste. Mientras circulaba, su eje trasero se desprendió, provocando el pánico entre los pasajeros.
Ante esta situación, el conductor, Sebastián Aragón Cano (31 años), hizo un giro para intentar “cunetearse”, pero desafortunadamente impactó contra un carretón, en el que iban María José (15) y Mauricio Vega (17), y la madre de ambos, Graciela Hernández Vega (35).
CARRETÓN IMPACTADO
El fuerte choque provocó el vuelco del carretón, que lanzó a sus pasajeros al adoquinado. Graciela Hernández resultó con lesiones en todo el cuerpo y con una herida en su muslo izquierdo. Su hijo, Mauricio, presentaba golpes y escoriaciones en el brazo izquierdo, mientras que María José fue lastimada levemente.
Las víctimas fueron trasladadas al Hospital Alemán-Nicaragüense, donde el doctor Ramón Cárdenas informó que las heridas de los ingresados no eran graves, por lo que ayer mismo serían dados de alta.
“VI VENIR LA MUERTE”
En el accidente también fue impactado el taxi placas T 11-864, conducido por Santos Martín Delgado, quien resultó ileso. “Vi venir la muerte, yo miré que el bus venía descontrolado hacia donde yo estaba, y sentí el golpe en la parte delantera del carro”, relató aún asustado Delgado.
Otro afectado fue el caballo que halaba la carreta donde viajaba la familia Vega, al resultar con heridas en las dos patas traseras.
FALTA DE MANTENIMIENTO A BUSES
Pasajeros consultados afirmaron que el conductor de la unidad de transporte no venía a gran velocidad, y reconocen que su pericia evitó que el bus se diera vuelta.
“El problema es que esos buses están viejos y no les dan mantenimiento, pero culpa del chofer no es, sino del dueño. El conductor venía lento, pero cuando se desprendieron las llantas él buscó cómo salirse de la calle”, afirmó María Auxiliadora Hernández,
“El bus venía como a 40 kilómetros por hora, venía lento. El problema fue que el eje se zafó de pronto y todos nos asustamos, pero el conductor evitó que el bus se diera vuelta”, dijo José Santos Mendoza.