“Estoy feliz y orgulloso de usar esto. Lo soñé, pero no pensé que sería posible. Sin embargo, ha sucedido. Significa que si crees, las cosas pueden ocurrir. Y si yo lo he logrado, entonces también otras personas lo pueden conseguir”, afirmó René “El Chelito” Cárdenas, con palabras revestidas de emoción, mientras le colocaban el saco naranja que usan los miembros del Salón de la Fama de los Astros de Houston.
Desde este sábado, Cárdenas, nacido hace 94 años en Managua, está junto a las más grandes figuras que ha tenido en su historia del equipo texano, organización que se fundó en 1962 como los Colt 45 de Houston y que luego se ha transformó en los Astros. Desde aquel primer día, René formó parte de sus transmisiones de beisbol en español, algo que también había hecho con los Dodgers desde de 1958, convetido en pionera en ese ámbito.
Cárdenas ingresó al Salón de la Fama de los Astros junto al extercera base de potente bate y solvente defensa, Ken Caminitti, quien se convirtió en el jugador número 22 en saltar a la inmortalidad. René es el sexto personaje no pelotero y cuarto locutor en ser exaltado. En la ceremonia estuvieron presentes la esposa y tres hijas de Caminitti; lo mismo que la esposa, hijo y familiares del destacado narrador pinolero, quien reside precisamente en Houston.
Antes de la ceremonia en el terreno de juego del Minute Maid Park de Houston, Cárdenas y los familiares de Caminitti intercambiaron impresiones con la prensa que cubre a los Astros. René se mostró muy emocionado y agradecido en todo momento. Varios miembros del Salón de la Fama del equipo texano estuvieron en la actividad y luego durante la ceremonia en el centro del campo, donde Cárdenas se unió al grupo de inmortales ahí presentes.
“Es para mí un honor ser parte de esta familia. Comencé a trabajar en 1958 en Los Ángeles con los Dodgers, pero me he sentido en casa en Houston desde la fundación de los Colt 45. Aún tengo fresco en mi memoria como se dio todo el proceso de mi contratación y lo bien que me trataron los Astros desde el primer día. Han sido una bendición en mi vida y la de mi familia”, indicó Cárdenas luego de la ceremonia de exaltación.
Su esposa Jilma y su hijo, René Jr. estuvieron con “El Chelito” en las actividades, lo mismo que una serie de familiares muy cercanos, mientras que en la ceremonia se unían Lance Berkman, Craig Biggio, Jeff Bagwell, José “Cheo” Cruz, Terry Puhl, Tal Smith, Ray Oswalt, entre otras celebridades incorporadas en promociones anteriores. Luego Cárdenas fue entrevistado por la cadena Space City que cubre a los Astros, mientras transmitían el juego contra los Medias Blancas.
“El mejor juego que narré en mi vida, el que recuerdo siempre, es el Juego Perfecto de Dennis Martínez en 1991 contra los Dodgers. Yo narraba para los Dodgers, pero mi corazón estaba con el lanzador nicaragüense que lanzaba para los Expos y celebré su éxito aquel día”, comentó Cárdenas, quien también contó anécdotas vividas a través de su larga trayectoria en las transmisiones de beisbol, en las que se inició a sus 16 años en Managua.
Cárdenas también señaló que Nicaragua ha ocupado en todo momento un lugar especial en su corazón, aunque lamenta no haber podido regresar desde 1979 cuando le confiscaron su casa, la que recuperó tras 20 años de juicios, pero que decidió no volver más. De igual manera indicó que espera que este homenaje de los Astros, también le abra las puertas al Salón de la Fama de Cooperstown, el máximo recinto del beisbol de las Grandes Ligas.