El Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE) sorprendió en abril con un fuerte crecimiento, luego de haber exhibido en marzo una desaceleración, que fue rápidamente superada en el siguiente mes con un repunte mensual de 7.4 por ciento, lo que hizo que el promedio en lo que va del año se situara en 4.6 por ciento, según nuevos datos del Banco Central de Nicaragua (BCN).
El promedio de los últimos 12 meses fue de 5 por ciento, por encima del 3.2 por ciento observado en similar periodo del año pasado. Tal es el aceleramiento que exhibieron las actividades económicas, que en marzo este indicador creció 1.3 por ciento, muy por encima de lo observado en el cuarto mes de este año.
Detrás del comportamiento del IMAE en sus distintos periodos antes mencionados, hay tres actividades económicas claves en ese desempeño, con tasas de dos dígitos de expansión en el acumulado de enero a abril: construcción (14.5 por ciento), hoteles y restaurantes (14.3 por ciento) y explotación de minas y canteras (14.1 por ciento).
También la construcción
También intenta colarse entre esos tres líderes del crecimiento energía y agua con un 9.8 por ciento en el primer cuatrimestre, sin embargo, su expansión ya en términos anualizados se ubica en 15.6 por ciento, tras un 12.4 por ciento reportado solo en abril, por mayor generación de energía eléctrica (13.1 por ciento de crecimiento) por la mayor producción de energía termoeléctrica, en sistemas aislados, eólica y biomasa. De igual manera, el suministro de agua y alcantarillado creció 4.6 por ciento.
Solo la construcción, que es la actividad económica que está este año liderando el crecimiento, desplazando a hoteles y restaurantes, en abril se expandió 10.4 por ciento por más producción de materiales utilizados en la construcción. Los materiales que mayor crecimiento registraron en este mes fueron: piedra cantera, arena, acero, concreto premezclado, adoquines, cemento y piedra triturada.
En el caso de hoteles y restaurantes, si bien su acumulado es de dos dígitos, solo en abril fue de 1.5 por ciento de aumento. El BCN atribuye la desaceleración de esta actividad a la estacionalidad asociada con la Semana Santa, que en 2023 se ubicó en el mes de abril y en este año fue en el mes de marzo.
En término mensual, el crecimiento de las actividades estuvo liderado por la explotación de minas y canteras con un 46.2 por ciento por mayor extracción de oro, plata, arena, piedra cantera, hormigón, piedra triturada, carbonato, toba, sal y piedra pómez.
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Otras actividades claves, pero con menor crecimiento
No obstante, actividades que tienen mayor peso en la formación del IMAE están experimentando crecimientos menores con relación a los sectores antes descritos, lo que impide que la expansión del indicador sea más limitada.
Por ejemplo la agricultura creció 1.9 por ciento en abril, tras varios meses difíciles, lo que ocasionó que cerrara el cuatrimestre casi al borde del terreno negativo, con un aumento de 0.9 por ciento. En el cuarto mes del año se reportaron mayores labores y producción registradas en los cultivos de arroz, tabaco, maní, soya, raíces y tubérculos, entre otros cultivos.
Similar comportamiento experimentó la actividad pecuaria, con una tasa de 0.2 por ciento (2.9 por ciento en el acumulado enero-abril), por más matanza vacuna, porcina y avícola. En cambio, se registró disminución en las exportaciones de ganado en pie y en la producción de leche y huevos.
Es la pesca y acuicultura la actividad no consigue retornar al crecimiento. Solo en abril disminuyó 2.2 por ciento, para cerrar el cuatrimestre con una contracción de 11.8 por ciento. Hay menor producción de camarón, y disminución en la captura de langosta, pulpo y pepino de mar, principalmente.
También el comercio y la actividad financiera
La industria manufacturera también está en el terreno negativo, aunque en abril creció 3.7 por ciento, pero en el cuatrimestre cae 0.9 por ciento. En el cuarto mes se reportó mayor producción de productos elaborados de carnes y pescados, bebidas, tabaco, textiles, derivados de petróleo, productos no metálicos, entre otros; y disminución en la producción de azúcar, arneses, productos lácteos, entre otros.
Por su parte, el comercio creció 14.2 por ciento, para un acumulado de 8.9 por ciento, por mayor demanda de productos al por mayor y al por menor.
En tanto, la actividad financiera creció 6.4 por ciento y 5.4 por ciento en el acumulado enero-abril, como resultado de mayores entregas de créditos y aumento en la captación de depósitos, tanto en moneda nacional como en moneda extranjera.