Las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos, más conocidas como Reglas Nelson Mandela, establecen cómo debe ser el trato a los presos desde diferentes aspectos. En total son 122 reglas y aquí te contamos cómo están distribuidas.
Los principios fundamentales de las Reglas Nelson Mandela que corresponden a las primeras cinco reglas se refieren a que estas normas se deben aplicar de forma imparcial sin discriminación. Además establecen que la privación de libertad no implica otras privaciones y recuerdan que en el tiempo de privación de libertad se debe trabajar en la reinserción en la sociedad de las personas detenidas.
En la gestión de los expedientes de los recursos encontramos, de la regla seis a la nueve, donde se hace referencia a que debe haber un registro de los detenidos. En el caso de los presos políticos, muchos de ellos no tienen casos en el Sistema de Causas, conocido como Nicarao.
La regla 11 se refiere a la separación por categoría, como dividir las celdas de hombres, mujeres, de presos procesados y condenados. De la norma 12 a la 17 se explica el tema del alojamiento de los reclusos.
Sobre la higiene personal hace referencia la norma 18 y de la 19 a la 21 se aborda el tema de ropas y cama.
“Todo recluso dispondrá, de conformidad con los usos locales o nacionales, de una cama individual y de ropa de cama individual suficiente, entregada limpia, mantenida convenientemente y mudada con regularidad a fin de asegurar su limpieza”, señala la regla, pero en Nicaragua muchos presos reciben cuando mucho una colchoneta.
Una buena alimentación está establecida en la regla 22 y el ejercicio físico y deporte está en la regla 23. Mientras que el tema de los servicios médicos está establecido de la norma 24 a la 35. Indicando que los presos deben tener acceso a servicios de salud, incluso de servicios de salud especializados.
Las restricciones, disciplina y sanciones están en las reglas 36 a la 46 y en la 43 se deja claro que queda prohibido el aislamiento prolongado.
Las Reglas Nelson Mandela establecen los instrumentos de coerción física en las normas 47 a la 49 y señalan que no deben ser de naturalezas degradantes ni que causen dolor.
Una de las denuncias en el trato a los presos políticos de Nicaragua es que a estos se les revisan las celdas y se les quitan productos que les llevan sus familiares. Los registros de reclusos y celdas están establecidos de la regla 50 a la 53.
Inclusive las Reglas establecen la información y derecho de queja de los reclusos, reflejados de la regla 54 a la 57, y de la regla 58 a la 63 establecen que deben tener visitas y contactos con el mudo exterior. “En la medida de lo posible, los reclusos serán internados en establecimientos penitenciarios cercanos a su hogar o a su lugar de reinserción social”, regla 59.
Sin importar la procedencia de los 141 presos políticos que mantiene el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo la mayoría de ellos están en Managua en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como La Modelo y el Sistema Penitenciario de Mujeres La Esperanza.
Los establecimientos penitenciarios de acuerdo con la regla 64 deberían tener una biblioteca y si hay un número suficiente de reclusos de la misma religión la norma 65 admite un representante calificado de ese culto.
Otras reglas se refieren al depósito de objetos pertenecientes a los reclusos, notificaciones, investigaciones, traslado de reclusos, personal penitenciario, inspecciones internas y externas, y en un segundo capítulo Reglas aplicables a categorías especiales.