Una delegación económica norcoreana viajó a Irán, en una visita poco común que despierta preocupaciones sobre la posible cooperación entre los dos países, informó el miércoles la prensa oficial de Pyongyang.
La delegación, encabezada por el ministro de Relaciones Económicas Externas, Yun Jong Ho, se trasladó el lunes a Irán, indicó la agencia estatal KCNA en un despacho de una sola línea que no ofreció detalles.
La visita se produce en momentos que Corea del Norte ha fortalecido sus relaciones militares con Moscú los últimos meses.
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Seúl asegura que el Norte ha enviado unos 7.000 contenedores de armas a Rusia para su guerra en Ucrania, posiblemente a cambio de la asistencia técnica de Moscú para su programa de satélites de espionaje.
Irán y Rusia también son aliados militares y políticos. Moscú estaría utilizando drones iraníes en la guerra en Ucrania.
La visita revela la intención norcoreana de ampliar y profundizar sus vínculos con Teherán, posiblemente al brindarle armas que Irán podría necesitar en una confrontación con Israel, comentó Hong Min, analista del Instituto Coreano para la Unificación Nacional.
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“Esta visita merece mucha atención dada la situación entre Teherán y Jerusalén”, dijo a AFP, agregando que Irán y Corea del Norte eran aliados de larga data que han cooperado en programas armamentistas desde los años 1980.
Irán lanzó el 1 de abril un ataque con drones y misiles contra Israel, en respuesta al bombardeo del consulado iraní en Damasco.
De la misma forma en que Pyongyang ha suministrado armas a Moscú, podría hacerlo a Teherán “a cambio de recompensas como petróleo y asistencia financiera”, agregó.