Juego perfecto. El 28 de julio de 1991 Dennis Martínez realizó la mayor hazaña posible para un pícher: lanzó un juego perfecto. Es decir, obtuvo la victoria en nueve innings con 27 outs perfectos, sin que ningún bateador rival se embasara, sin bases por bola, sin hits y sin jonrones. Lo hizo jugando para los Expos de Montreal contra los Dodgers de Los Ángeles. Fue el juego perfecto número 13 en 111 años de beisbol, desde 1880. A la fecha se han lanzado solo diez juegos perfectos más, para un total de 23. En Montreal, Canadá, hogar de los Expos, existe un premio llamado Dennis Martínez, que se otorga al mejor pícher amateur.
Dennis. Su nombre originalmente se escribe con una sola ene y así está inscrito en Nicaragua. Sin embargo, cuando llegó a las Grandes Ligas de Estados Unidos, le agregaron una ene más para evitar confusiones en la pronunciación. A él le gusta más con doble ene y así firma sus autógrafos.
Histórico. El 14 de septiembre de 1976 hizo historia como el primer nicaragüense en llegar a Grandes Ligas, debutando con los Orioles de Baltimore a la edad de 22 años. Quince años más tarde se convirtió en el primer pelotero latinoamericano en lanzar un juego perfecto. A lo largo de su carrera en Grandes Ligas (1976-1998) jugó, también, para los Expos de Montreal, los Indios de Cleveland, los Marineros de Seattle y los Bravos de Atlanta.
Récord. Con 245 victorias, durante 19 años y 363 días fue el lanzador latino más ganador en la historia de las Grandes Ligas, hasta ser superado por el dominicano Bartolo Colón, en agosto de 2018.
El Presidente. En buen nicaragüense se le conoce como “El Chirizo”, pero su apodo internacional es “El Presidente”. Así lo bautizó Ken Singleton cuando el pícher granadino jugaba con los Orioles de Baltimore, en 1979. Singleton era el mejor bateador de los Orioles y, a los 24 años de edad, Dennis Martínez se alzaba como el principal abridor del equipo y uno de los lanzadores más confiables de la Liga Americana. Cuando se supo que había finalizado la larga dictadura de los Somoza, Singleton dijo que Martínez estaba lanzando tan bien que se convertiría en “el presidente de Nicaragua”. Sin embargo, el sobrenombre cobró fuerza hasta 12 años más tarde, el día de su juego perfecto. En el calor del momento Vin Scully, narrador de los Dodgers, exclamó cuatro palabras que quedaron para la historia: “El Presidente, El Perfecto”.
Granada. Originario de Granada, es el menor de los seis hijos que procrearon Emilia Ortiz y Edmundo Martínez. Su familia era de pocos recursos económicos, algo que lo empujó a ser muy competitivo. Desde los siete años jugaba en las calles granadinas y en la adolescencia se escapaba de clases para ir a lanzar la pelota con algún equipo local. En Granada conoció a Luz Marina García, una muchacha tres años menor, de quien se enamoró a primera vista, el mismo día que se mudó frente a su casa, cerca de la iglesia Xalteba. Entonces él tenía 17 y ella 14. Se casó con ella antes de partir a probar suerte en las ligas menores de Estados Unidos y a la fecha continúan juntos.
Alcoholismo. Su padre sufrió la enfermedad del alcoholismo y murió en un trágico accidente, al ser arrollado por un camión. Hacia 1983 Dennis también vivó una época en la que fue presa del alcohol. “Me salió la oportunidad de estar sólo en los mejores hoteles, las facilidades, el ambiente nocturno estaba disponible. En algo tenía que tropezar y me estaba empezando a desviar fuerte y tuve un año pésimo, pero Él no me abandonó, me hizo ver el problema y reflexionar buscando ayuda”, narró a la revista Magazine en diciembre de 2008. Ferviente católico, asegura que logró salir a flote con ayuda de Dios, la Virgen y su esposa Luz Marina.
Estadio. En octubre de 2017 el régimen de Daniel Ortega le rindió homenaje con la inauguración del Estadio Nacional de Beisbol Dennis Martínez. Solo unos meses después estallaron las protestas ciudadanas de 2018 y el expelotero tomó una postura opositora, lo que condujo a que, en noviembre de 2022, la dictadura removiera su nombre y en diciembre rebautizara el estadio como “Soberanía”. La reacción de Martínez fue “dar gracias a Dios”, porque desde esa estructura salieron “las balas de la muerte” que segaron la vida de muchos manifestantes.
“Empezaron a circular las duras noticias e investigaciones periodísticas de que el Estadio Nacional se había convertido en un cuartel de donde salían los matones del pueblo, me golpeó, y luego tras las investigaciones de la CIDH donde confirmaron el uso de francotiradores ubicados en el coloso, me hundió aún más”, escribió en un artículo de opinión publicado en LA PRENSA. “Así como le di las ‘Gracias a Dios’ cuando ese hermoso estadio llevaba mi nombre, le digo ‘Gracias a Dios’ otra vez por haberlo removido”.
Comisión. En febrero de 2021 se unió a la Comisión de Buena Voluntad que buscaba unir a la oposición para enfrentar a Daniel Ortega en las elecciones presidenciales de 2022. Al final, una cacería de opositores, en la que cinco aspirantes a la Presidencia fueron puestos tras las rejas, impidió que se celebraran unos comicios legítimos.
Iglesia. En marzo de 2023 dedicó a monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa y preso político de la dictadura de Daniel Ortega, su lanzamiento honorífico durante el Clásico Mundial de Béisbol que se jugó en Miami. Recientemente, el 11 de junio, lanzó la primera bola en el duelo entre los Orioles de Baltimore y los Reales de Kansas City y la dedicó a la Iglesia Católica de Nicaragua. “En Miami le dediqué el lanzamiento a monseñor Rolando Álvarez y ahora lo hice por la Iglesia Católica, por toda la persecución que vive en el país. Es mi manera de apoyarlos desde la distancia por los abusos a los que la están sometiendo, pero pase lo que pase el bien prevalecerá, por eso me esforcé aún más en tirar strikes”, declaró.