Cuatro personas recién fallecieron luego que fueron picadas por varias abejas. Un bus que se precipitó a un abismo, se pasó llevando las cajas de madera en las que apicultores almacenaban los insectos. Se desconoce si estas eran abejas africanizadas, pero lo cierto es que las múltiples picaduras provocaron que las víctimas sufrieran un “infarto y obstrucción de las vías respiratorias por reacción alérgica”.
Las víctimas tenían 8, 24, 28 y 84 años de edad, y si bien, la mayoría eran personas jóvenes, lo importante es la “idiosincrasia” que tenga el paciente, es decir, si este es altamente o no sensible a una picadura.
“Hay pacientes que pueden ser picadas en pocas cantidades y pueden llegar a la muerte; y hay otras personas que pueden recibir hasta cientos de piquetes, y le causa síntomas locales y sistémicos, pero no lo lleva a la muerte”, explicó el doctor Rommel Meléndez, especialista en Toxicología.
“En dependencia de la cantidad de piquetes, así también será la cantidad de toxinas que van a introducir al cuerpo y eso va a desencadenar una serie de reacciones que pueden conllevar hasta la muerte”, agregó Meléndez.
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Sin embargo, destacó que la persona “ultramentesensible” aun con poca cantidad de piquetes puede presentar taquicardia, sudoración, visión borrosa, alteraciones neurológicas, convulsiones, hipotensión, y un paro cardiorrespiratorio que lo puede llevar a la muerte.
Atención contra reloj
Meléndez señaló que, al ser picado por una abeja, esto puede llevar, inicialmente, a presentar reacciones locales y posteriormente sistémicas, que puede afectar el sistema nervioso, hematopoyético, neurológico, incluso en el riñón. Este cuadro clínico severo dependerá de qué tan sensible sea el paciente o de qué tanta toxina recibió.
“Los síntomas se pueden presentar desde el piquete mismo, que causa dolor; después una reacción local como la urticaria, y después se desencadenan procesos inmunológicos más graves que pueden llevar a la arritmia, paro cardiorrespiratorio o falla renal”, declaró el especialista.
El paciente puede desarrollar estos cuadros severos dentro de las 72 horas, según el médico, pero si una persona es altamente sensible debe recibir atención médica inmediata.
“Una desgracia aislada”
El veterinario Noel Martínez señaló que los apicultores nicaragüenses sí trabajan con abejas africanizadas, por lo que es muy posible que estas hayan picado a las personas accidentadas, sin embargo, enfatizó que no se debe “satanizar” a estos insectos debido a esta situación, ya que esto se puede calificar como una “desgracia aislada”, que no es recurrente en el país.
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Martínez declaró que estas abejas provienen de África y sus características son ser resistentes a temperaturas, hambre y plaga, además que son “muy prolíferas para producir miel”, pero no son agresivas.
“En este caso fue que las personas que lamentablemente se accidentaron eran sensibles al piquete de la abeja, aun si fueran sido picadas por abejas que no son productoras de miel y liberado mucha toxina, probablemente hubiera sucedido lo mismo. Es una desgraciada aislada, simplemente aquí (en el accidente) se sintieron atacadas las abejas porque les destruyeron su colmena”, dijo el veterinario.
“Las abejas por su naturaleza no son seres agresivos. El instinto de la abeja es atacar a quien la ataca porque ella defiende a su reina, y si su colmena no está siendo atacada ella no reacciona”, aclaró Martínez.
El veterinario expresó que el hábitat de las abejas silvestres son los lugares donde haya agua y floración juntas, “porque ellos buscan alimentación y agua”. “No seamos alarmistas, es muy lamentable la situación (accidente) pero no satanicemos a las abejas”, aconsejó.
El accidente ocurrió en la comunidad Los Aguacates, en San Sebastián de Yalí, departamento de Jinotega.