El teléfono de Marco Antonio Figueroa suena constantemente desde el pasado 27 de marzo. Los mensajes y llamadas se originan desde medios de México y Chile para hablar con el técnico chileno sobre el éxito más grande alcanzado por la selección de futbol de Nicaragua bajo su dirección: su cuarta clasificación a la Copa Oro 2023 y el primer ascenso a la Liga A de Naciones, los dos torneos principales de la Concacaf.
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Las entrevistas de Figueroa giran alrededor del mismo tema: él y su capacidad para dirigir a cualquier equipo chileno o su selección. “Cuando dije que estaba capacitado para dirigir la Roja (selección de Chile) me trataron de payaso. Hoy queda demostrado que la selección de Nicaragua juega mejor que la chilena”, afirmó el seleccionador nacional en una entrevista con DirecTV Sports de Chile.
“Me siento un técnico capacitado, exitoso. Hago que mis equipos jueguen bien… La selección de Nicaragua juega bien y me tiene sin cuidado lo que digan o dejen de decir. Me da lo mismo que digan, que soy chanta (hablador) o malo. Mis logros dicen lo contrario. La última copa internacional de la Universidad de Chile fue conmigo y fui despedido sin una razón justa, lo mismo que en Universidad Católica. Mis números en Chile son tremendos, por eso nunca he entendido tanto rechazo hacia mi persona como profesional”, sostuvo el técnico de 61 años.