En el mensaje de Pascua de este Domingo de Resurrección, el papa Francisco pidió por varios países donde la gente sufre algún tipo de situación, y señaló desde lo que pasa en Ucrania hasta mencionar a Nicaragua.
El pontífice pidió a Jesús Resucitado que sostenga a las comunidades cristianas que celebran la Pascua en “circunstancias particulares” como las de Nicaragua y Eritrea, posicionando de esta manera a la nación centroamericana al mismo nivel de lo que pasa en el país africano.
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“Sostiene, Señor, a las comunidades cristianas que hoy celebran la Pascua en circunstancias particulares, como en Nicaragua y en Eritrea, y acuérdate de todos aquellos a quienes se les impide profesar libre y públicamente su fe”, dijo el pontífice desde el balcón central de la basílica de San Pedro, en Roma.
Situación en Eritrea
Pero, ¿qué pasa en Eritrea? El país africano es una constante de violaciones a los derechos humanos, donde la gente huye del servicio militar nacional. El organismo Amnistía Internacional señaló que las fuerzas eritreas han llevado a cabo ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, violaciones y otras formas de violencia sexual, y desplazamiento forzado.
El régimen de Eritrea está bajo el mando de Isaías Afewerki desde hace 30 años. Se describe como una república presidencial de partido único, en la que el presidente sirve como jefe de gobierno y jefe de Estado.
Eritrea solo reconoce cuatro grupos religiosos oficialmente registrados: la Iglesia Ortodoxa Tewahedo de Eritrea, el Islam sunita, la Iglesia Católica y la Iglesia Luterana de Eritrea, por lo que existe una persecución religiosa, sobre todo con los cristianos y Testigos de Jehová.
“Presos de fe”
La organización Release Internacional estimó en marzo más de 400 “presos de fe” en Eritrea, en la que la mayoría de los prisioneros son pentecostales o evangélicos. “Muchos están detenidos indefinidamente y han estado recluidos durante más de una década, a menudo sin cargos en lugares que se mantienen en secreto para sus familias. Las autoridades se niegan a divulgar los registros”, dicta una nota de prensa.
Un informe de 2021 del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre la libertad religiosa en Eritrea, detalla que “los grupos (religiosos) no registrados carecen de los privilegios de los grupos registrados, por lo que sus miembros han sido arrestados y maltratados y su eventual liberación de la detención a veces ha estado condicionada a una renuncia formal a su fe”.
En tanto, el portal Ecclesia informa de detenciones de sacerdotes y obispos por criticar la injerencia estatal. Además de la intervención del régimen en obras sociales de ortodoxos, musulmanes y católicos, que llevó en el 2019 al cierre de escuelas, clínicas y hospitales gestionadas por la Iglesia Católica. Un escenario que ya está viviendo Nicaragua.