Norchad Omier es un nicaragüense que actualmente juega en la categoría universitaria de baloncesto con los Huracanes de Miami de la Conferencia de la Costa Atlántica. Recientemente fue nombrado como mejor deportista amateurs, junto a Erasmo Ramírez por la Asociación de Cronistas Deportivos de Nicaragua (ACDN).
En el 2021, su actual entrenador afirmó que algunos equipos de la NBA le iban a dar especial atención desde su segundo año. “Pienso que sus números serán más altos todavía en esta temporada. Hay siete u ocho equipos interesados en la NBA, que lo van a llegar a ver a las prácticas. Cuando lo traje a Miami Prep sabía que tenía algo especial. Esperamos cosas grandiosas con él”, comentó en ese momento su entrenador Pilín Álvarez, entrenador de Omier en High School.
Su destacado rendimiento en las canchas de Estados Unidos ha hecho que la preparatoria que lo firmó en 2019 le diese oportunidad a otros jóvenes nicaragüenses.
Hubiera sido jugador de beisbol
Desde pequeño había tenido interés por diversos deportes por lo que practicó voleibol, balonmano, fútbol, natación y atletismo.
Omier inició jugando baloncesto casi por casualidad a los 14 años. Recuerda que se encontraba jugando béisbol junto a sus amigos en campo en el barrio de Bluefields que lo vio crecer. Llevaba un par de años jugando béisbol por lo que ya destacaba en este deporte.
Al finalizar el partido con sus amigos decidieron descansar. Un hombre que llevaba un breve tiempo observándolos aprovechó la oportunidad para acercarse y preguntar por el joven. Omier, con dudas, respondió que era él a quien buscaba, sin saber que ahí iniciaría una aventura que cambiaría completamente su vida.
Quien lo buscaba era Ronnie Cayasso, el primer entrenador de baloncesto de Omier y director de la Academia de Básquetbol de Bluefields. Omier resaltaba por su altura y rendimiento físico. Pero no fue hasta los 17 años que se empezó a enfocar por completo en lo que ahora es su pasión.
“Mi papá me dijo que si quería ser bueno en un deporte tenía que escoger uno y enfocarme, y sabía que a mí me gustaba el baloncesto. Yo sé que a él le dolió un poco, porque el deporte que reina en Nicaragua es el béisbol y quería que yo lo jugara. Pero está feliz de que yo esté cumpliendo mis sueños”, relató Omier a DOMINGO.
Joven de familia y fe
Omier recuerda con melancolía los días de su infancia donde podía compartir con sus padres, hermanos, primos y amigos. Es muy allegado a su familia y afirma que haber ido a estudiar hace tres años a Estados Unidos significó un duro golpe.
Seguir sus sueños implicó alejarse de su madre y padre. Habla a diario con ellos y no deja de agradecerles su apoyo.
Tiene gratos recuerdos de su padre porque ha sido fundamental para su carrera como deportista. “Somos muy unidos, siempre ha hecho tiempo para mí, aunque trabaja, e incluso durante un año fue mi entrenador mientras jugaba béisbol. Siempre le ha encantado ver diversos deportes, y me hizo saber que si yo quería jugar me iba a apoyar en todo lo que él pudiera”.
Destaca por su humildad
“El joven más humilde que he entrenado. Norchad Omier es muy bendecido. Mucha gente ama a este tipo por lo humilde que es. El mejor compañero de equipo que puedas tener”, compartió Pilín Álvarez en redes hace un par de días.
Omier se siente orgulloso de su origen costeño porque afirma que fue en sus tierras donde se enamoró del baloncesto. Este joven es el primer nicaragüense en jugar baloncesto universitario de Primera División.
“Lo que más me gusta del baloncesto es el andar de arriba para abajo, pero en Nicaragua podía pasar tiempo con mis amigos que también jugaban y lo disfrutaban igual que yo”, recordó el joven.
Atesora recuerdos de los diferentes deportes en los que ha jugado. Una anécdota que lo marcó fue haber participado en el campeonato de balonmano cuando estaba en secundaria jugando con el Colegio Adventista y su equipo resultó ganador. También recuerda su participación en los Juegos Centroamericanos Baloncesto Sub-17 en Panamá donde la selección nacional ganó la medalla de oro.
“Creo que esa experiencia me hizo enamorarme aún más del deporte. Yo tenía amigos que siempre iban y luego nos contaban sus experiencias. Cuando yo fui, creo que nadie pensaba que íbamos a quedar invictos y menos a ganar. Antes de ir a Panamá les dije a todos que íbamos a ganarlo y así fue”, comenta.
El joven costeño, de 2.1 metros de altura, se ha convertido en el favorito de los aficionados de su actual equipo, los Huracanes de Miami. Cuando juega se pueden escuchar las ovaciones hacia Omier mientras algunos cargan grandes recortes de su cara con la boca abierta, otros con el logo de la comida para bebés de la UM y una cuchara.
Estos peculiares carteles tienen origen por una de las frases características de Omier grita a sus compañeros cuando está en la cancha: “Baby Food”.
“Un día estaba como, ‘dame de comer, dame la pelota’”, comentó a un periódico estadounidense. “Esto Baby food. Simplemente se quedó esa frase. Lo repitieron todos los días después de eso”.
Luego de cursar la preparatoria en Miami Preparatory School, Omier estuvo un tiempo en la Universidad Estatal de Arkansas y luego se cambió a la Universidad de Miami.
“Parte de eso me ayudó a llegar a este punto en este momento”, continúo relatando al diario estadounidense. “Simplemente siento que estoy alrededor de un gran equipo. Realmente admiro a todos mis compañeros de equipo y creo que ellos también me admiran a mí. Creo que estoy en el lugar correcto (con) los entrenadores correctos. Siento que todo va muy bien”.
Este joven sueña con llegar a tener su propia empresa por lo que actualmente está estudiando Administración y Negocios. Quiere, además, poder ayudar a los jóvenes y niños en Nicaragua que sueñan con ser deportistas.
Reconocimiento
A finales de 2022, el Comité Olímpico de Nicaragua celebró la Gala Olímpica donde premiaron a los 10 mejores atletas amateur del país. Para sorpresa de los críticos, Omier fue colocado en la ultima posición de este top. Se asume que esta situación fue porque la elección está completamente politizada.
Sin embargo, en la premiación de la ACDN, Omier resultó vencedor sobre el joven que destacó en la premiación del Comité Olímpico. Este reconocimiento tomó en cuenta su amplio margen de logros de la temporada con su anterior equipo, de 12.6 puntos y 12.3 rebotes por partidos; un récord para la franquicia de Arkansas. Se consideró que ha sido titular todos los partidos en Huracanes de Miami.
Moisés Ávalos, presidente de la ACDN quería colocar a Omier en la categoría profesional, pero no fue aceptado.
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