Tras la expulsión de la Universidad Centroamericana (UCA) del Consejo Nacional de Universidades, sale a luz cómo el millonario fondo del 6 por ciento está siendo repartido entre ocho universidades controladas por el orteguismo, según el informe de ejecución presupuestaria del Ministerio de Hacienda y Crédito Público, correspondiente al primer trimestre de este año.
En abril de este año, el régimen de Daniel Ortega impulsó una reforma a la Ley General de Educación y la Ley de Autonomía Universitaria para expulsar como miembro del CNU a la UCA, una de las casas de estudios superiores más prestigiosas de Nicaragua y con cuyo fondo impulsaba un programa de becas para estudiantes de escasos recursos.
Casi cuatro meses después de la arremetida, se conoce oficialmente que este año el régimen había despojado casi en su totalidad del 6 por ciento a la UCA tras varios años consecutivos de reducciones y que desde el año pasado ya preparaba la salida de esta del CNU al solo haberle asignado 250,000 córdobas para 2022, lejos de los 100 millones del 2021.
Según los números de Hacienda, los 250 mil córdobas que se tenía planificado entregar a la UCA este año ya fueron transferidos y estos fueron para gastos corrientes y por primera vez no se le dio para gasto capital, un presupuesto que se definió en el último tramo del año pasado de un bolsón de 5,508 millones de córdobas, equivalentes al 6 por ciento que todas las universidades definidas por ley y el CNU deben repartirse.
La repartición del fondo
La universidad más beneficiada con ese fondo multimillonario es la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua-Managua (UNAN-Managua), que captó 1,703 millones de córdobas, de los cuales 425.81 millones de córdobas ya fueron entregados por Hacienda.
Este año, esta última casa de estudios, que está bajo el control de Ramona Rodríguez, leal al régimen de Daniel Ortega, recibió un incremento en su asignación de 154 millones de córdobas con respecto al 2021, es decir 9.94 por ciento.
En la segunda posición se ubica la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua-León, con 995.25 millones de córdobas, por encima de los 905.46 millones de córdobas del año pasado, lo que significó un aumento de casi 90 millones de córdobas. De ese total, 248.81 millones de córdobas ya fueron entregados por Hacienda a marzo de este año.
La Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) se sitúa en la tercera posición, con 898.42 millones de córdobas, superior a los 817.36 millones de córdobas del año pasado. Ya en el primer trimestre de este año, 224.60 millones de córdobas estaban siendo ejecutados por las autoridades de esta universidad.
El mayor ganador
Pero es la Secretaría Técnica del Consejo Nacional de Universidades la que tiene peso entre las cuatro entidades que más se lucran del 6 por ciento, al recibir este año 733.58 millones de córdobas, muy por encima de los 439.07 millones de córdobas el año pasado. Es decir, que este órgano del CNU fue el que más se benefició del despojo de los cien millones de córdobas a la UCA, al haberse dado 294 millones de córdobas más que el año pasado, equivalentes a un incremento de 67.08 por ciento.
Y es que a través de la Secretaría Técnica se dirigen todas las medidas represivas que el régimen de Ortega adopta contra la comunidad estudiantil universitaria de Nicaragua, de donde nació la “mecha” que prendió abril de 2018.
La última arremetida del CNU fue dada a conocer por la Secretaría Técnica, la cual ordenó a las universidades, debidamente inscritas en Nicaragua, informar sobre la salida y entrada del país, con al menos siete días anticipados, del personal docente y administrativo de las casas de estudio.
Para eso se pide enviar a las autoridades el nombre de la persona en cuestión, número de pasaporte, país de procedencia o destino, fecha de entrada o salida del país, motivo de la visita, duración de la visita y puerto de entrada o salida. Esto incluye al personal académico o científico que sea invitado en el exterior para venir a Nicaragua.
Pero más allá de eso, lo cierto es que detrás de la Secretaría del CNU, la Universidad Nacional Agraria es la quinta casa de estudios de mayor peso dentro de los que captan dinero del 6 por ciento este año, con 483.36 millones de córdobas, ligeramente superior a los 439.75 millones de córdobas del año pasado.
Las menos beneficiadas
Las universidades de la Costa Caribe nicaragüense figuran entre las que menos incremento experimentaron en sus transferencias provenientes de este fondo constitucional. La Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe Nicaragüense y la Bluefields Indian & Caribbean University captan 211.42 millones de córdobas cada una, ligeramente superior a los 192.34 millones de córdobas del año pasado otorgados a cada una.
A la Universidad Internacional Antonio de Valdivieso, que sobrevivió a la expulsión de la UCA, se le asignó 65.81 millones de córdobas, un poco más que los 59.87 millones de córdobas del año pasado, según muestran cifras del Ministerio de Hacienda y Crédito Público.
La Universidad Nacional Francisco Luis Espinoza Pineda, que antes era conocida como Universidad Católica Agropecuaria del Trópico Seco “Presbítero Francisco Luis Espinoza Pineda” y que fue confiscada por el orteguismo, del bolsón recibe este año 16.44 millones de córdobas, superior a los 10 millones de córdobas del año pasado.
Y finalmente, el régimen decidió incorporar dentro de la repartición del bolsón del 6 por ciento, que se alimenta de los impuestos de los nicaragüenses, a la Universidad Nacional Multidiciplinaria Ricardo Morales Avilés, con tres millones de córdobas. Esta universidad realmente fue conformada por todas las casas de estudios que fueron confiscadas por el régimen de Ortega en una oleada represiva que implicó el despojo, incluso, al antiguo aliado del orteguismo, Leonardo Torres, de la Universidad Hispanoamericana (Uhispam).