¿Te gusta lucir bien, comprar prendas que están de moda y te gastás casi todo tu salario en ello? Si es así seguramente pasés pendiente de las tendencias de la temporada, pero… ¿sabías que para conseguir un buen look no se necesita gastar de más? Solo es cuestión de hacer las compras de vestuario de forma inteligente.
Para lograrlo, lo primordial es que cuando vayás a comprar ropa o calzado analicés qué tan rentable será esa compra. El secreto está en no comprar algo solo porque está de moda y terminamos usándolo una sola vez.
O en ocasiones compramos de manera compulsiva y solo terminamos perjudicando nuestros bolsillos, obviando que ese dinero pudimos haberlo usado para ahorrar o comprar algo que sí necesitábamos en nuestras casas.
Por eso te traigo varias recomendaciones para que hagás compras acertadas.
✔ Antes de comprar revisá tu guardarropa: esto es algo que por lo general no se hace, cometiendo el error de comprar ropa que tal vez se parece mucho a algo que ya teníamos. Aplica también con calzado.
✔ Antes de irte de compras tenés que hacer una lista de las prendas que realmente necesitás y aferrarte a que solo podrás comprar los artículos de tu listado, no vayas a caer en la tentación de las ofertas que no siempre son reales.
✔Aprovechá las rebajas solo si se ajustan al listado que mencionamos anteriormente. Vas por un pantalón, pero el descuento es en faldas. ¿Tenés que «aprovechar el descuento» realmente? Recordá siempre analizar la rentabilidad de esa compra.
✔Comprá lo fundamental y en colores neutros. En el closet de una mujer u hombre no pueden faltar las camisas mangas largas o corta de colores blanco, beige o negro, así como jeans azul oscuro. En el caso de los zapatos, es indispensable los de color negro, piel o deportivos. Cada compra que hagás pensá qué múltiples usos podés darle. Ejemplo: unos jeans azules clásicos podés usarlos con camisetas o camisolas para un look informal, pero también podés usarlos con un blazer para una reunión de trabajo. No podrías hacer lo mismo con unos jeans muy desteñidos, rotos o con brillantes.
✔ No te cerrés a la opción de la ropa usada. Aunque para muchos esta idea no es de su agrado, lo cierto es que es una opción para sacar mayor provecho a tu dinero, pagando menos por mejor calidad de prendas. Incluso podés hallar productos nuevos y con etiquetas.
✔ Entrá a todas las tiendas, aunque luzcan baratas o caras, lo ideal es rebuscar, cotizar y comparar precios, pues en algunos casos nos encontramos similares prendas a mucho menor precio. Adiós a los prejuicios, muchas veces la tienda que «parece cara» puede darte mejores opciones.
✔ Cuando vayás de compras es preferible que lo hagás sin compañía impaciente para que podás probarte la ropa sin presiones.
✔ Si vas a comprar en línea, indagá bien las tallas y leé los comentarios de los clientes ya que podrían ayudarte al momento de decidir una compra y revisá las condiciones de devoluciones, porque si la prenda que elegiste no resulta ser de tu agrado podrías tener la opción de devolverla y no arriesgarte a perder tu dinero.
Como ves hay muchas cosas que podés poner en práctica para optimizar tu dinero y lucir bien. ¡Empecemos!