A través del tiempo, ha quedado demostrado que comparar a Shohei Ohtani con Babe Ruth ya no es una profanación para el símbolo más sagrado del beisbol. El jugador bidireccional de los Ángeles de Los Ángeles, está reescribiendo la historia en cada oportunidad y la gran referencia es siempre el “bambino”, el pelotero más talentoso que ha visto este deporte.
Este jueves por la tarde, Ohtani colgó siete innings en blanco con 11 ponches frente a los Medias Rojas de Boston, derrotados 8-0 por los Angelinos, y a la vez, el japonés descargó dos hits en cuatro turnos. Sin embargo, el detalle histórico de su actuación quedó reflejado en la hoja de anotación: bateó de tercero en el line up y brilló desde el box en Fenway Park.
La última vez que un lanzador actuó en Fenway Park y bateó en uno de los primeros cuatro puestos del line up, fue el 20 de septiembre de 1919. Y, claro ese fue Ruth, quien quedó sin decisión en la victoria 4-3 de Boston ante los Medias Blancas. Ruth lanzó 5.1 innings para nueve hits, tres carreras, una base y tres ponches, mientras bateaba de 3-1 y una empujada.
Aquel año, Ruth terminó con balance de 9-5 y 2.97 en 133.1 innings, justo cuando se movía hacia sus años finales como monticulista. En 1916 había concluido con 23-12 y 1.75 y en 1917, 24-13 y 2.01. Pero después de 1919, solo ganó tres partidos más en las dos campañas siguientes, para luego dedicarse exclusivamente a sembrar pánico con el madero en mano.
No sabemos hasta dónde podrá avanzar Ohtani este año, pero este jueves lució fenomenal en Boston. Durante las siete entradas de labor, empleó 99 lanzamientos, de los cuales 81 fueron strikes. Su velocidad tuvo un promedio de 97.2 millas y en momentos alcanzó las 100.3 millas. Hizo un despliegue de rectas, sliders y splitters con precisión de cirujano.
El japonés consiguió 29 swings fallidos (swings and misses), lo que constituye un récord personal. Su cifra más alta de bateadores tirándole y sin pegarle a la bola, había sido de 26 contra los Atléticos el 19 de septiembre de 2019. Así que estaba intransitable y mantuvo un duelo contra el veterano Rich Hill, quien colgó cinco innings en blanco ante los Angelinos.
El año pasado, Ohtani cerró con 9-2 y 3.18 en 130.1 innings con 156 ponches desde el box y como bateador, tuvo .257, 42 jonrones y 100 carreras empujadas, unas cifras respetables para un artillero de élite, pero ninguno de los mejores bateadores de hoy día, es capaz de subir a la colina y eliminar adversarios con un repertorio electrizante como el suyo.
“Es el mejor pelotero de la liga. Creo que es algo en lo que todos estamos unánimemente de acuerdo”, dijo el zurdo Hill. Creo que realmente debemos apreciar lo que estamos viendo, porque es algo que no habíamos visto en 100 años”, agregó. “No tener que enfrentarlo es lo que más me gusta”, indicó Jared Walsh, quien disparó jonrón y empujó cuatro carreras en su apoyo.
Ciertamente, no hay discusión sobre Ohtani y sus superioridad manifiesta en las Grandes Ligas.