La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) expresó a través de un comunicado que por respeto a los procedimientos de la Santa Sede, se abstiene de pronunciarse sobre la salida del nuncio apostólico, Waldemar Stanislaw Sommertag del país.
La comunicación oficial de la CEN surge después de que su presidente, Monseñor Carlos Herrera, confirmara al Canal 10 que el nuncio había sido removido por el papa Francisco. “No se han dado buenas relaciones entre el Papa, ha decidido que él (Nuncio) renuncie a esa función. Había ciertas limitaciones, entonces si no hay comunicación, de qué sirve estar en esa función de diplomático”, dijo Herrera según el citado medio.
Pero, de acuerdo con el comunicado de la CEN, la acreditación del nuncio ante el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo es un asunto de “exclusiva competencia bilateral” entre El Vaticano y la dictadura.
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La CEN también indicó que los obispos fueron informados por el encargado de negocios de la Nunciatura Apostólica, Monseñor Marcel Mbaye Diouf, que el nuncio Waldemar Stanislaw Sommertag “ha salido de Nicaragua hacia Roma”, el pasado domingo, 6 de marzo.
Una fuente de la Iglesia católica confirmó a LA PRENSA que el comunicado “es real” y que sería publicado en unos momentos en sus redes sociales.
LA PRENSA supo que el nuncio estaba en El Salvador
Sommertag llegó a Nicaragua como nuevo nuncio apostólico el 15 de febrero de 2018, sin embargo, la labor del religioso comenzó a tener protagonismo a raíz de las protestas antigubernamentales en abril del mismo año.
El religioso figuró, junto con otros obispos de la CEN, como testigo en el fallido segundo diálogo nacional entre el régimen de Ortega y diversos sectores de la sociedad civil. Asimismo, jugó un papel importante en la liberación de los primeros presos políticos.
El pasado lunes 7, la Nunciatura Apostólica de Nicaragua circuló un comunicado de prensa en el que se informaba a las misiones diplomáticas y organismos internacionales que monseñor Waldemar se «ausentó» del país desde el domingo 6 de marzo, y a la vez informó que la sede diplomática, ubicada en Managua, quedaba a cargo del secretario, monseñor Marcel Mbaye.
LA PRENSA llamó a la sede de la Nunciatura Apostólica en Managua para conocer cuándo podría regresar monseñor Sommertag, sin embargo, la persona que atendió y que prefirió no identificarse respondió que «no tenían nada más que decir que lo ya informado en el comunicado».
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Este Diario confirmó que el nuncio se encontraba en la Nunciatura Apostólica de El Salvador. Ante los intentos de comunicarnos con él en los días anteriores, la respuesta remitida por su persona fue que el lunes «estaba ocupado» y el martes nos dijeron que «no se encontraba en la sede».