Familiares de la presa política Ana Margaria Vijil informaron a través de redes sociales este sábado que la opositora envió un mensaje desde su celda en la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como el nuevo Chipote, donde permanece aislada por sus carceleros.
Su madre, Josefina Gurdián, conocida como doña Pinita, dijo que esta tarde pudo visitar a su hija que lleva más de seis meses detenida en la DAJ. Según su madre, Ana Margarita le pidió que difundiera un mensaje al pueblo de Nicaragua.
En el mensaje, Ana Margarita recuerda que este 22 de enero se conmemora la masacre de la Avenida Roosevelt, a manos de la Guardia Nacional de Somoza en 1967.
“Todas las dictaduras son iguales en todos los países y en todos los tiempos. Con la dictadura actual hemos sufrido también masacres, cárceles, persecución y destierro. Por ese motivo no puede haber en Nicaragua borrón y cuenta nueva”, dice en su mensaje.
El “borrón y cuenta nueva” fue la frase que utilizó Daniel Ortega el pasado 10 de enero cuando asumió su cuarto periodo presidencial consecutivo.
Tras las protestas de 2018, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), señalaron los actos de represión y los crímenes de lesa humanidad del régimen de Ortega.
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“Nunca olvidaremos a los asesinados, y cuenta nueva habrá hasta que haya justicia sin impunidad. Entre todos y todas, con nuestro esfuerzo estamos logrando la gestación de un país nuevo donde no exista la corrupción, donde podamos vivir en paz y democracia, con oportunidades para todos y todas las nicaragüenses”, continúa diciendo en su mensaje Ana Margarita, publicado por su mamá en su cuenta de Facebook.
“El bien siempre triunfará sobre el mal y aunque hoy vivamos tiempos de oscuridad recordemos que nunca la noche es más oscura que cuando está amaneciendo. ¡Aquí no se raja nadie!”, concluye.
La hermana de Ana Margarita, Josefina Vijil, también compartió el mensaje en su cuenta de twitter destacando que su “increíble hermana Ana Margarita Vijil envió un mensaje desde su celda de aislamiento”
Este 22 de enero, Ana Margarita cumple 223 días detenida. Su familia ha denunciado que permanece en aislamiento por lo que han considerado que es una forma de tortura y represalia en su contra por ser opositora a la dictadura de Daniel Ortega.