Irving Larios, economista e integrante de la Articulación de Movimientos Sociales (AMS), cumple 120 días detenido en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como el nuevo Chipote. Fue detenido el 20 de septiembre acusado por la Fiscalía por “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional”.
Este opositor de 63 años fue detenido por estar bajo investigación de la Ley 1055, “Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo a la Independencia, la Soberanía y Autodeterminación para la Paz”, conocida como “Ley Guillotina”, la cual ha sido señalada por defensores de derechos humanos nacionales e internacionales de ser creada para callar las voces disidentes del régimen Ortega-Murillo, por lo cual las autoridades en los últimos meses han detenido a varios líderes opositores, entre ellos ex precandidatos presidenciales, jóvenes, campesinos y excombatientes históricos.
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Antes de su detención, Larios publicó en redes el mensaje de agradecimiento a sus amistades por pensar en su seguridad, reafirmando que él seguiría resistiendo. “Les agradezco a mis amigas y amigos que me insisten en que lo mejor hoy es irse del país, les reitero que mi decisión es; ni me fui, ni me voy, me quedo resistiendo”.
Sus familiares en la última visita denunciaron que Larios sigue en una celda de castigo, violando lo establecido en las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos, también conocidas como Reglas Nelson Mandela.
Asimismo, se le está violando el derecho al debido proceso establecido en el artículo 10 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, porque no ha tenido entrevista privada con su abogado. De igual manera, sus familiares han denunciado que estar en una celda de castigo potencializa sus problemas crónicos de presión alta.
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“LA MESA DE ARTICULACIÓN se siente directamente afectado en su propio cuerpo y tomará las medidas nacionales e internacionales a su alcance para terminar con las violaciones de derechos de nuestros miembros. Haremos llegar nuestra palabra a todas las embajadas de nuestros países, a organismos internacionales de derechos humanos, y a nuestros propios gobiernos denunciando esta grave violación contra uno de nuestros miembros. Exigimos la liberación inmediata de nuestro colega Irving Larios Sánchez y el cese del hostigamiento a las organizaciones de la sociedad civil nicaragüense”, denunció en su comunicado la Mesa de Articulación de Asociaciones Nacionales y Redes de ONG de América Latina y el Caribe el año pasado por la detención de su integrante Irving Larios.
