Docentes de colegios públicos de Tipitapa, que han preferido hablar desde el anonimato con LA PRENSA por temor a represalias, confirmaron que son varios los maestros afectados por el Covid-19 en ese municipio.
Los profesores denunciaron que pese a presentar síntomas asociados a la pandemia son obligados a asistir a los salones de clases después de algunos días de reposo y cuando sus colegas requieren hospitalización no se informa a la comunidad educativa.
La Unidad Sindical Magisterial confirmó que han recibido varios reportes sobre maestros y familiares contagiados en al menos tres centros escolares del municipio. En Tipitapa se conoció el caso de la subdirectora del colegio Rubén Darío Dos.
Baja asistencia
Ella está embarazada y su estado de salud es grave. Fue diagnosticada con neumonía, se encuentra en una sala de Cuidados Intensivos, pero sus colegas temen que los síntomas estén asociados a la enfermedad porque el coronavirus se ha manejado a discreción desde su aparición y son varios los maestros que junto a miembros de su familia han sido contagiados en los últimos meses.
“En las escuelas de Tipitapa es un secreto a voces, desde que inició la pandemia han tapado los casos de Covid. Muchos de los maestros deben presentarse a impartir clases y si el caso no es severo los tratan como una enfermedad común. A una de las profesoras solo le dieron tres días de reposo”, expresó una colaboradora de este centro escolar.
“Ahorita que ya se corre el rumor de la profesora habrá más bajas de asistencia. Nosotros lo tenemos medido. Cuando hay gente con Covid los niños se desaparecen y si llegan son poquitos”, refirió otra de las docentes que prefiere guardar su identidad.
Esta maestra señala que la subdirectora nunca creyó en la agresividad del virus. “En la Iglesia nos han pedido oración por la salud de la profesora. Nosotros estamos pidiendo por ella y su bebé para que salgan bien y ambos puedan luchar desde la cama de ese hospital”, refirió esta docente.
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Los educadores de Tipitapa recuerdan que el año pasado el señor que estaba a cargo de la seguridad del centro y que era pastor de una iglesia evangélica local se convirtió en una de las primeras víctimas de la pandemia, pero las autoridades rechazaron que la causa de su deceso haya sido por Covid. “El Centro Escolar Rubén Darío Dos lamenta el sensible fallecimiento de nuestro guarda de seguridad interna”, se leía en el anuncio de Facebook.
Prefieren no enviarlos a clases
Una madre de familia de este centro escolar aseguró que por más que se oculten los casos de coronavirus, al final se dan cuenta porque los rumores corren como pólvora y la mayoría prefiere no arriesgar a sus hijos y optan por no enviarlos a clases presenciales.
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Los maestros temen que además del colegio Rubén Darío Dos el virus ya haya sido propagado en algunas escuelas comunitarias con la que este centro tiene cercanía como son: Adela Morales y Miraluz.
Maestros sobrevivientes del virus en el centro escolar se muestran preocupados, porque su entorno está con varios casos sospechosos del virus. “En las escuelas de Tipitapa la vida parece normal. Tenemos docentes graves y vemos que la vida sigue igual con la docencia como si no pasara esta terrible enfermedad”, lamentó uno de los profesores.