Juan Lorenzo Holmann, secretario de la Junta Directiva de LA PRENSA, el diario más antiguo de Nicaragua, reafirmó una vez más el compromiso que ha adquirido este medio de comunicación de continuar firme informando a la población, ahora exclusivamente a través de las plataformas digitales, tras la retención ilegal del papel que se encuentra en un almacén fiscal, como otra medida de presión al periodismo independiente por parte de la dictadura de Daniel Ortega. «Esto no es un cierre», dijo.
Este jueves 12 de agosto circuló la última edición impresa de LA PRENSA —por tiempo indefinido— pero Holmann recalcó que se seguirá informando desde este sitio web oficial y las redes sociales oficiales, hasta que la Dirección General de Aduanas (DGA) autorice la exoneración de la materia prima retenida. «El dejar de imprimir no significa que vamos a dejar de insistir en que nuestro papel sea liberado, porque es un derecho», refiere Holmann.
«Esto no es un cierre, esto no es que apagamos las luces y nos vamos, no, esto es un impasse que nosotros creemos que de alguna forma en la parte impresa se va a solucionar y si no se soluciona seguiremos haciendo nuestro trabajo a través de las plataformas digitales (…) Esto no es como en los años 80, que vino la censura y nos cerró, en los años 80 no teníamos una plataforma digital por la cual pudiésemos seguir haciendo nuestro trabajo, en este momento sí la tenemos», manifestó el directivo.
Colaboradores se mantendrán
El secretario de la Junta Directiva descartó que como consecuencia de este nuevo bloqueo aduanero el Diario se vea obligado a prescindir de los servicios de sus trabajadores en áreas específicas como la rotativa o la redacción, sin embargo reconoció que la empresa se vería severamente afectada económicamente por la falta de ingresos en publicidad en la versión impresa.
«Ahorita nadie queda sin empleo, no puedo tomar una decisión de esa índole porque no sabemos cuál es el futuro verdaderamente y nosotros hemos sido siempre muy responsables en cuanto a nuestros colaboradores y nunca vamos a dejarlos en el desamparo», aclaró Holmann.
El 6 de febrero de 2020 el régimen liberó toneladas de papel después de mantenerlo secuestrado por más de 500 días, lo que provocó fuertes pérdidas económicas a esta empresa. Así como mantuvo secuestrado el papel sin dar explicación, el régimen tampoco dio explicación al liberarlo. Sin embargo, en esta ocasión no dan respuesta a todas las gestiones legales de rigor que la empresa ha cumplido para que le sea entregado su material.
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«Nosotros seguimos operando y en nuestras plataformas digitales tenemos una muy buena cobertura y aceptación en publicidad, (pero) en el periódico impreso obviamente la publicidad la perdemos y también perdemos lo que se hace por la venta del periódico impreso», expuso el secretario.
DGA sigue sin responder
Hasta este jueves, con la última revisión que hizo la empresa a través de su agente aduanero, se verificó que la DGA no da respuesta a la solicitud de exoneración. «Hoy en la mañana el agente aduanero me dijo que la solicitud sigue de la misma forma, es decir no hay ninguna respuesta», refirió.
Los insumos importados por LA PRENSA entran al país por el puerto de Corinto, pasan a un almacén fiscal y luego la empresa solicita la exoneración de esa importación en particular para entrega y traslado a las bodegas del Diario. El derecho a la exoneración fiscal para las importaciones de los medios de comunicación escritos, radiales y televisivos está establecido por principio constitucional.
LA PRENSA por ser un medio de comunicación con función social tiene derecho a la exoneración de impuesto por mandato del artículo 68 de la Constitución Política, que establece que “la importación de papel, maquinaria y equipo y refacciones para los medios de comunicación social escritos, radiales y televisivos así como la importación, circulación y venta de libros, folletos, revistas, materiales escolares y científicos de enseñanzas, diarios y otras publicaciones periódicas, estarán exentas de toda clase de impuestos municipales, regionales y fiscales”.
El papel se encuentra secuestrado porque las autoridades de la DGA no aprueban el trámite de solicitud de exoneración que realizó LA PRENSA desde el 26 de julio pasado.
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Según la ley, las autoridades tienen un máximo de diez días para responder dicha solicitud, sin embargo, en esta ocasión han pasado 18 días desde el inicio del trámite.
En este nuevo bloqueo la dictadura de Ortega a través de la DGA tiene retenido un total de 23 toneladas de papel, sin incluir las casi 84 toneladas que vienen en camino.
Un calvario que lleva años
Antes de 2018, el trámite de exoneración no demoraba el plazo estipulado a los 10 días. La DGA aprobaba en cuestión de poco tiempo la solicitud. Sin embargo, después de ese año todo cambió, y la traba de aduana se volvió un calvario en cada importación.
Entre 2018 y 2019 la DGA retuvo el papel, planchas, repuestos y correas para la rotativa de este Diario por más de 500 días sin ninguna explicación.
La materia prima que fue retenida se contabilizó en 92 toneladas de papel periódico, 49 de papel para imprenta, planchas, gomas, revelador para rotativa, correas, tinta, y repuestos que entraron al país por medio de diez embarques. El costo del papel y los insumos ascendió a 225,352 dólares, más el pago de almacenes fiscales.
En esa ocasión, la materia prima para imprimir el Diario fue liberada el 6 de febrero de 2020, sin embargo los 17 meses de secuestro de los insumos causaron grandes pérdidas a esta empresa ya que tuvo que imprimir en papel más caro y se vio forzada a recortar fuertemente el alcance de la circulación, lo que redujo considerablemente las ventas.