El presidente en funciones del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), Miguel Rosales, manifestó este lunes que los miembros de esa organización están valorando la posibilidad de retirarse de la Coalición Nacional (CN), debido al trato ofensivo, excluyente y marginal que reciben de otros miembros de esa plataforma de unidad opositora.
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Rosales dijo que a muchos de los miembros del partido ya se les terminó la paciencia, porque desde que aceptaron la invitación de participar en la Coalición Nacional “comenzaron los insultos, comenzaron los epítetos, comenzaron las descalificaciones”.
“¿De qué unidad se está hablando dentro de la Coalición Nacional? Cómo es posible que nosotros estemos allí en una construcción democrática en la que pretendemos vendernos como una esperanza, como un cambio, como una transformación de los patrones tradicionales de hacer política, pero vemos el canibalismo, vemos verdaderamente la exclusión de tratar de marginar, apartar y separar, y estar mancillando ya no solo el nombre de la institución sino de las personas que representan a nuestra institución”, dijo Rosales a través del programa radial “La hora liberal”, trasmitido por radio Corporación.
El presidente del PLC anunció que este martes 27 de octubre el Comité Ejecutivo Nacional del PLC, valorará su participación en la Coalición Nacional.
“Tendremos esta reunión para solicitarle a los miembros de la Coalición Nacional que cambien esas actitudes, ese tipo de comportamiento, ese tipo de actuaciones”, confirmó Rosales a LA PRENSA.
La Coalición Nacional es un espacio que busca la unidad de los sectores opositores, pero se ha destacado más por los conflictos y diferencias entre sus miembros, que por la resolución de sus divergencias. Particularmente el PLC es constantemente cuestionado por el pacto entre el caudillo de esta organización, Arnoldo Alemán, con el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en el año 2000, y que le permitió a los sandinistas regresar al poder en 2007.
Litis interna del PLC
Las polémicas y litis internas del PLC, además del pacto Alemán-Ortega para repartirse el poder con el Frente Sandinista (FSLN) en el 2000, ha generado dudas sobre su participación en la CN. Actualmente, el partido se encuentra fraccionado entre el ala arnoldista, que impuso a Miguel Rosales como nuevo presiente, y los seguidores de la anterior presidenta depuesta, la diputada María Haydeé Osuna, quien tiene en su poder el reconocimiento del poder electoral como representante legal del partido.