Cristhian Díaz Rodríguez y Adolfo García Mendoza, ambos del barrio Monimbó de Masaya, son las más recientes víctimas de las detenciones arbitrarias que realiza la Policía Orteguista (PO) en este departamento. Ambos son acusados de tirar bombas de contacto.
Los dos fueron secuestrados la mañana del jueves 28 de noviembre, cuando se encontraban trabajando. Fueron trasladados a la estación policial de Masaya, donde aún permanecen sin poder ver a sus familiares.
Lea además: Reprograman audiencia inicial contra miembros de la UNAB detenidos en Masaya
“Vinieron de repente a la casa, entraron a improsulta (a la casa), aventaron a mi mamá, pasaron aventando a quien se pusiera (de frente). Nosotros le dijimos que nos enseñara la orden (de captura), de qué le acusan, por qué se lo llevaban y ellos no dijeron nada”, expresó Brenda López Téllez, cuñada de Díaz Rodríguez, quien agregó que en la detención participaron civiles encapuchados.
Los oficiales solo manifestaron que Díaz Rodríguez estaba “en proceso de investigación” por unas bombas que sonaron la noche del pasado miércoles en Masaya.
Aunque López Téllez declaró que quien está detrás de las explosiones de bomba es la misma institución policial, también se maneja que son los autoconvocados como manera de protesta en contra del régimen orteguista.
La detención de García Mendoza se dio mientras trabajaba de albañil. Según López Téllez, que es familiar de la víctima, solo manejan la información de que una patrulla se lo llevó a la fuerza hacia la delegación policial.
Lea también: Policía Orteguista en cacería de autoconvocados por bombas de contacto en Masaya
🆘OTRO SECUESTRADO🆘
La policía orteguista secuestró hoy 28/Nov al ciudadano Adolfo García Mendoza en Masaya.
Detenido ilegalmente por estar vinculado supuestamente con explosión de bombas, demandamos no se continúen violando los derechos de los nicaragüenses. #SOSNicaragua. pic.twitter.com/PuDxDNiIpK
— Team ADNIC (@TeamADNIC_) November 29, 2019
Víctima al margen de las protestas
Díaz Rodríguez, de 31 años, se mantuvo al margen de las protestas antigubernamentales cuando estas iniciaron el año pasado, declaró su cuñada. “A la hora que supuestamente sonó la bomba, antier a las siete de la noche, él se encontraba en el culto”, dijo.
La víctima tiene tres hijas menores de edad, quienes estuvieron a la hora de la detención arbitraria. “Al ver que cómo se supo aquí adentro (en la casa), de que nos opusimos y empezamos a discutir con ellos (los oficiales), se puso a orar y dijo que se iba a ir para que no nos agredieran a nosotros”, relató Díaz Rodríguez.
Aumenta la ola de secuestro
La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) y la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) coinciden en que los casos de secuestro han aumentado, principalmente en Masaya. La UNAB reporta al menos dos secuestros diarios. La CPDH registra en esta semana seis casos de secuestro, tres de ellos ocurridos en Masaya.
Carla Sequeira, abogada de la CPDH, expresó que Masaya es el blanco de la PO por la rebelión que los ciudadanos han mostrado desde el inicio de las protestas sociales, y también por el sufrimiento durante estos últimos 19 meses.
“Estamos claros que justamente por la rebeldía innata de Masaya que continúan en resistencia y eso es la paranoia de la Policía que andan buscando a quién detener”, manifestó Sequiera.
Además destacó que los secuestros nunca han cesado, sino más bien se disparan los casos cuando hay una acción de protesta. “Desde una, dos o tres semanas para acá se ha incrementado el abuso de la Policía, desde el día que las madres empezaron la huelga de hambre hemos visto un aumento en las detenciones, hay que dejar claro que nunca han cesado los secuestros (ni) el abuso de la autoridad”, señaló la defensora de derechos humanos.
La Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia registra desde abril hasta este 28 de noviembre a 161 presos políticos que se encuentran en las diferentes cárceles del país, y siete desaparecidos.