Pese a la negativa del gobierno de Daniel Ortega, el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) sesionará de forma extraordinaria este jueves 2 de agosto para discutir un proyecto de resolución que crea una comisión especial, cuya misión será integrarse al Diálogo Nacional y “coadyuvar a soluciones pacíficas y sostenibles” a la crisis sociopolitica en Nicaragua, que deja más de cuatrocientos muertos.
El Consejo Permanente actuará con base en la resolución aprobada por 21 países en semanas pasadas de condena al gobierno de Daniel Ortega, por la violación de derechos humanos, y pese a la protesta del ejecutivo nicaragüense, que previamente descalificó la comisión especial como “injerencia”.
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¿A qué le teme Ortega?
El exembajador de Nicaragua ante la OEA, José Luis Velásquez, explicó que la OEA está elevando la presión internacional para que Ortega acepte la vía democrática y que la reacción negativa del régimen se debe a que sabe que acciones similares adoptó el organismo continental contra la dictadura de Somoza por las violaciones de los derechos humanos de los nicaragüenses.
Según Velásquez, Ortega “sabe que en 1978 la OEA conformó una comisión de buenos oficios, que integró Estados Unidos, Dominicana, Colombia y Guatemala con el fin de buscar una salida al conflicto armado”, pero fracasó.
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Sin embargo, señala Velásquez, “el informe de esa comisión especial fue contundente en que la solución a la crisis pasaba por la renuncia de Somoza Debayle. Con base en ello, luego hubiese una sesión de cancilleres de la OEA donde se impusieron sanciones diplomáticas y económicas y donde se le exigió la renuncia al dictador y el adelanto de las elecciones”.
“Un mismo escenario existe hoy, porque aunque Ortega siga diciendo que aplastó la protesta, la realidad es que ya mira el peligro de sufrir sanciones internacionales y si niega la entrada a la comisión especial de la OEA, acelerará las sanciones y su aislamiento”, agregó.
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El nuevo proyecto de resolución lo impulsan Estados Unidos, Argentina, Chile, Colombia, Perú, México, Canadá y Brasil. El texto, disponible en la web de la OEA, indica que la “comisión especial para Nicaragua coadyuvará al proceso de Diálogo Nacional, incluyendo medidas de apoyo, acompañamiento y verificación en coordinación con los esfuerzos en curso de la Organización y de otros actores regionales e internacionales”.
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Si en el Consejo Permanente aprueba la conformación de la comisión especial para Nicaragua, será compuesta por “un representante de cada grupo regional” de países, deberá integrarse a más tardar el venidero 10 de agosto y rendirá informe mensual al Consejo sobre “el avance de sus gestiones”, según el proyecto de resolución que se divulgó el martes.
Suárez: OEA que deje de andar “jodiendo”
Jacinto Suárez, diputado orteguista y secretario de Relaciones Exteriores del gobernante FSLN, reiteró el rechazo.
“Que la vayan a crear en un montón de países donde hay crímenes y a que la OEA le importa poco, que la vayan a crear en Brasil, en Argentina, donde hay 750 muertos en movilización contra (Mauricio) Macri. Esa comisión (especial) es interventora. ¿En nombre de la relación con la OEA hay que aceptar la intervención? Que haga lo que debe, no andar jodiendo”, fustigó Suárez.
Ortega se niega a volver a la Mesa de Diálogo Nacional al oponerse a que hayan elecciones adelantadas, como lo demanda la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia. Por el contrario, la respuesta del régimen ha sido recrudecer la represión con la detención ilegal y el enjuiciamiento de las personas que participan o apoyan las protestas, incluidos miembros de la Alianza, que exigen la renuncia de Ortega y de su esposa y vicepresidenta designada, Rosario Murillo.
Elecciones tienen que ser la solución
Gonzalo Koncke, jefe de gabinete del secretario general de la OEA, en declaraciones a la cadena CNN dijo que la organización “ya ha propuesto la vía para buscar soluciones” a la crisis en Nicaragua, que son: fin de la represión, la violencia y las muertes; protección de los derechos humanos y los caminos democráticos y electorales que pasa por permitir a los nicaragüenses expresarse en las urnas.
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La CIDH registra 295 muertes por la crisis. “La OEA a través de sus órganos está trabajando, con la CIDH, la resolución del Consejo Permanente y se siguen analizando vías de acción para la implementación de la resolución, y la Secretaría General en diferentes aspectos, que tiene que ver con los temas electorales, porque más tarde que temprano las elecciones tienen que ser la solución”, afirmó Koncke.
Aseguró que siguen trabajando con el Gobierno en el calendario electoral para tenerlo listo en 2019.
España da fondos
El Gobierno español aportará 600,000 euros adicionales para apoyar financieramente varias iniciativas puestas en marcha por la comunidad internacional para hacer frente a la crisis de Nicaragua, informó el Ministerio de Asuntos Exteriores. España aportará a la OEA 400,000 euros adicionales a los 180,000 aportados hasta el momento y 200,000 más al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y al Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (Meseni). “Con estas contribuciones. España mantiene su apuesta por una salida a la crisis en Nicaragua libre de violencia, basada en un proceso de fortalecimiento democrático y de diálogo inclusivo, sincero y comprometido, y con el necesario desempeño, sin trabas, por los organismos internacionales ya desplegados en el país”, dijo.